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Los convocantes exigen a las empresas la firma del convenio corregido porque los trabajadores “perderían poder adquisitivo”
El comité negociador del convenio colectivo de la limpieza pública viaria convocó ayer una huelga con carácter indefinido que coincidirá con Semana Santa y cuyo comienzo está fijado para el próximo lunes 10 de abril.
El motivo de este cese de la actividad que afectaría a la planta de Urbaser, Clece –en el Puerto–, ACC –limpieza de alcantarillado– y Trace no es otro que la “falta de firma” del convenio acordado el pasado 28 de noviembre después de que la Inspección de Trabajo lo devolviese por “una serie de errores que requerían de subsanación”, según sus convocantes.
Pese a tratarse de unas modificaciones “sin importancia”, a juicio del comité negociador, consistentes en la “adaptación de algunos párrafos a la normativa actual”, los trabajadores aseguran desconocer la razón por la cual las empresas “no lo han firmado” una vez corregido y después de cuatro meses. El comité negociador calcula que ha solicitado a las empresas reunirse “hasta dos veces al mes”.
Mantenidos varios contactos con los representantes de las empresas del sector, los convocantes denuncian que la firma del documento “se demora cada vez más” y, si transcurre un año sin suscribirse ni publicarse en el BOCCE, las empresas “se pueden descolgar, aplicar el convenio como consideren oportuno y los trabajadores perderían poder adquisitivo”.
El comité negociador se disculpó ante la ciudadanía por esta “medida de presión” que emprenderán si no hay respuesta pero, aseguró, “al parecer es la que entienden los empresarios”. El colectivo pidió a la Ciudad Autónoma “que intervenga y aclare lo que está ocurriendo”.
¿Qué hubieran dicho algunos si la convocatoria de huelga se hubiera hecho para el Ramadan o la fiesta del cordero?