Agentes de la
Policía Local detuvieron esta pasada madrugada en Ceuta a un varón por un delito de resistencia, así como conducción temeraria y otras posibles imputaciones. La intervención se llevó a cabo en el Pueblo San Antonio, en torno a la una y media de la madrugada, cuando el conductor de un
coche, que supuestamente había robado en Pozo Rayo, terminó estampándose contra un muro ubicado justo en la carretera de la bajada de la ermita a su paso ya por uno de los antiguos accesos al Parque de San Amaro, ahora cerrado. Hasta el lugar acudieron unidades de la Policía Local y una de la UIR. Además, por si era necesario el apoyo, acudieron agentes de la UPR del
Cuerpo Nacional de Policía que no llegaron a intervenir. Este mismo domingo se ha procedido al traslado del detenido hasta el Palacio de Justicia. No ha reconocido su implicación en los hechos ni aceptado una conformidad que se iba a traducir en condena por lo que ha sido puesto en libertad con cargos a la espera de juicio. El operativo de la Policía Local terminó con el arresto del conductor que se había dado a la fuga de los agentes. Esa escapada le llevó hasta la zona del Pueblo San Antonio donde terminó chocando lateralmente contra un muro. Al parecer conducía un vehículo robado. In situ los agentes comprobaron la titularidad del mismo, tratándose de un coche de una empresa de alquiler.
El gran estruendo sobresaltó a los vecinos que residen en las últimas fases de este núcleo residencial. Pudo haber tenido consecuencias trágicas porque la carretera que enlaza este lugar con la ermita es, de madrugada y fines de semana, un continuo ir y venir de coches algunos a gran velocidad. De hecho, con el vehículo empotrado contra el muro y la Policía actuando se generó un tapón en la carretera y se tuvo que cortar el tráfico para que no subieran más coches y evitar también que los que bajaban entorpecieran la labor policial. Ya en torno a las dos de la madrugada se producía la llegada de una grúa municipal para retirar el coche que fue trasladado al depósito de Benzú. Al conductor se le llevó a las dependencias de la Jefatura Superior mientras se indagaba el origen del coche siniestrado. El varón nada más chocar se escapó escondiéndose en unos matorrales próximos donde lo detuvo la Policía. Hacía tiempo que no se producía un robo de un coche así por lo que se baraja que quería cometer algún delito posterior. Así terminaba este servicio policial en plena madrugada.