Ha llegado septiembre y con él da inicio una nueva ronda solar para el grupo Scout 238 Omaha de Ceuta. Una cita en la que el colectivo dará la bienvenida a los nuevos miembros en el parque de San Amaro y que el año pasado pudo recuperar tras la pandemia.
El esperado acontecimiento, que es una suerte de inicio del curso escolar para el colectivo, tendrá lugar durante la jornada del sábado.
La naturaleza será testigo de cómo pequeños y mayores realizarán diversas actividades con el objetivo de integrar a sus nuevos compañeros, así como de compartir el "sentimiento scout"
Se trata de un día para disfrutar y hacer piña en el que tanto scouters como "educandos" disfrutarán al aire libre y compartirán experiencias con sus compañeros y compañeras tras estos meses de descanso.
El objetivo principal de esta jornada, explica el grupo, es la de, a través de la enseñanza en valores que aporta el movimiento scout, integrar en cada sección a los nuevos jóvenes que formarán parte del grupo en esta nueva ronda solar.
Además, conocerán la importancia de cuidar el ecosistema que los rodea a través de una gran variedad de juegos donde primará el trabajo en equipo, la concienciación y la limpieza del medio ambiente.
Una asamblea en igualdad
Por su parte, los scouters mantendrán su tradicional indaba tras finalizar la actividad y cuya finalidad es la de compartir y presentar el programa educativo de cada sección de cara a esta nueva ronda.
El indaba es una palabra zulú que significa reunión, asamblea, intercambio colectivo de ideas para la acción y que era celebrada por los Izin Duna ("Principales Hombres") de los pueblos zulu y xhosa en Sudáfrica.
Robert Baden Powell, fundador del Movimiento Scout, destacó este espacio colectivo en donde cada participante tiene la oportunidad y derecho de aportar propositivamente y ser reconocido, independientemente de su origen o de su orientación política o social.