El ceutí José María Sánchez se ha aventurado en el mundo literario con el lanzamiento de su última publicación ‘Sanitarios de Ceuta en la batalla del Ebro’. Se trata de un relato en el que cuenta la historia de su padre, Francisco Sánchez Torres, cuando tuvo que marchar con tan solo 19 años desde Ceuta, su ciudad natal, para ayudar en los hospitales en el Frente del Ebro, uno de los escenarios más cruentos de la Guerra Civil Española.
“Este libro es un homenaje a mi padre y me ha encantado escribirlo”, recalca Sánchez, quien analiza que lleva dándole forma desde hace unos tres años y trabajando con la editorial Avant para su publicación desde el pasado mes de julio. De hecho su primo Francisco Sánchez lo animó a hacerlo.
Su autor cuenta que esta obra tiene dos vertientes, una que es la que su padre cuenta en su trayecto hasta llegar a la zona de la contienda y otra en la versión que narra a su hermana durante otro viaje durante unas vacaciones.
La idea de publicar esta novela surgió hace unos años cuando su padre estaba en activo, antes de su jubilación. “Él tenía un diario y en este iba escribiendo sus historias y una de ellas es cuando tuvo que partir para el Frente del Ebro, el 23 de mayo de 1938. Tuvo que hacer un curso de sanidad muy acelerado en cuatro meses”, señala.
"Lo destinaron a un centro de clasificación para tratar a los combatientes heridos y muchas veces lo mandaban directamente a las trincheras"
“Es una biografía parcial de su vida, pero en este relato se centra en cuando lo llaman de forma anticipada para marcharse a ayudar de forma asistencial en la contienda española”, matiza.
Sánchez recalca que su padre no mató a nadie ni empuñó ningún arma de guerra para disparar, ya que su labor era básicamente sanitaria. “A él lo destinaron a un centro de clasificación para tratar a los combatientes heridos y muchas veces lo mandaban directamente a las trincheras. No tomó parte de ningún bando”, argumenta el autor.
De hecho, sostiene que a su padre le “quedó un poso que quería echar fuera” con esa memoria que ya reflejó en un documento muy rudimentario en los años 80, pero que solo llegó a repartir entre sus familiares más cercanos.
“Él tenía muchas ganas de que su historia fuera contada y en el verano del 77, en un viaje de vacaciones a Barcelona con la familia montados en un Seat 850, nos lo contó por primera vez”, puntualiza.
Al respecto, afirma que él no ha cambiado nada de la versión de su padre ni de su léxico, solo lo adaptó y lo amplió: “Es muy importante para mí respetar lo que él escribió”. Igualmente, quiere agradecer a todos los servicios de documentación de los archivos militares que le facilitaron información para el desarrollo de su escritura.
Además, resalta que años más tarde hicieron un viaje por Aragón, donde su padre vivió lo peor de la Guerra Civil. Visitaron algunas localidades en las que sirvió atención médica como Fraga, Batea o Calaceite. Enclaves que fueron los últimos en caer en la contienda.
Por otro lado, el escritor ceutí hace un inciso en que una de sus inspiraciones a la hora de publicar este trabajo fue el autor Chaves Nogales, quien escribió en el exilio su libro ‘A sangre y fuego’, quien como republicano no tomó parte de un lado o de otro.
“El libro no tiene que ver con la política. En él no se habla de enemigos ni de adversarios, sin términos belicistas, solo se habla de españoles y se reflejan las barbaridades que vivió por la guerra. Tanta sangre que vio y tanta terquedad”, indica.
Es más, muchas veces su padre tenía que decidir a qué herido atender por cuestiones de vida o muerte. También detalla que tuvo un pequeño debate por utilizar el término sanitario o enfermero, ya que el primero es más generalizado porque tuvo que hacer funciones en todos los departamentos de medicina.
En uno de los capítulos del libro se habla del trayecto que realizaron los 18 jóvenes cabos de Sanidad de Ceuta, recién incorporados al servicio militar, hasta llegar a la contienda.
"Se fueron en un tren hasta Sevilla y por las noches se escapaban para irse a las verbenas de las cruces de Mayo hasta que los pillan"
“Primero cogieron el barco hasta Algeciras, en una despedida multitudinaria, ya que también partían ese día unos 300 alférez del Cuartel del Rif. Luego se fueron en un tren hasta Sevilla y por las noches se escapaban para irse a las verbenas de las cruces de Mayo hasta que los pillan”, narra el autor.
De ahí, cogieron más trenes hasta Cáceres, luego Valladolid y después a Zaragoza. A partir de este punto, ya no había más estaciones por lo que tuvieron que hacer autostop para llegar a Fraga y un camión los recogió.
Entonces viene un hecho que marcó la historia, ya que según enuncia Sánchez, un oficial se echó a reír cuando hicieron la presentación porque les dijo que no tenían que estar allí, sino en Valladolid.
“Por un error, se tuvo que quedar allí a vivir el final del conflicto nacional”, se lamenta Sánchez. En definitiva, una obra que demuestra que la justicia no reside en lo que vemos, sino en lo que somos. El libro, que será publicado gracias a la editorial Avant, aún no está a la venta física, sino que está en preventa en Amazon y otras librerías hasta el próximo 29 de enero.
Sinopsis de la obra
En mayo de 1938, dieciocho jóvenes cabos de Sanidad de Ceuta, recién incorporados al servicio militar, se encuentran frente a un giro inesperado en sus destinos. Obligados a dejar su tierra natal, se embarcan rumbo al Frente del Ebro, uno de los escenarios más cruentos de la Guerra Civil Española. Este relato captura la historia poco común de estos militares, quienes, sin haberlo elegido, se ven arrastrados a una realidad llena de incertidumbre y desafíos.
Un testimonio poco conocido y revelador de un capítulo sombrío en la historia, contado a través de las memorias del padre del autor, Francisco Sánchez Torres.
