Consumo multa a una naviera que obligó a que el perro de una familia viajara en una jaula de la bodega en malas condiciones
El 8 de diciembre de 2014 se convirtió en una auténtica pesadilla para la familia de Anko. Un perro que tuvo que hacer el trayecto en barco entre Algeciras y Ceuta en el interior de una jaula en la bodega del ferry, como última salida después de que, inicialmente, se pretendiera que viajara en las jaulas exteriores del buque, en pleno invierno.
En esa fecha empezó un auténtico culebrón para la familia de este can que decidió emprender una lucha digna de David contra Goliath, al entender que debían hacer valer sus derechos y conseguir que no se volvieran a repetir situaciones de este tipo.
Ahora, cuatro años después, han recibido una respuesta sellada por la Consejería de Sanidad, en la que se les comunica que se ha procedido a resolver el expediente sancionador con la imposición de una sanción de 12.400 euros a la naviera Balearia.
Los afectados han contado su experiencia a El Faro, siendo una forma de hacer pública una situación que les dolió profundamente. Aquello “lo defino como un viaje horrible aguantando ser el centro de todas las miradas de los viajeros que estaban presenciando lo que ocurría, de cómo se nos trató en un principio a mí, a mi familia y después a mi perro Anko”, traslada.
Primero se les instó “mediante presiones a sufrir importantes sanciones económicas de no hacer caso, a meter a mi perro en las jaulas del buque, en las jaulas exteriores en pleno diciembre y finalmente en las jaulas que tenían en la bodega. Todo porque se me había olvidado llevar el transportín. Desconociendo la legislación de transporte de animales en transportes marítimos no me quedó otra opción que acceder”, añade.
Después de lo ocurrido, comenzaría una pelea por conseguir que esto no volviera a suceder y que, además, conllevara una justa sanción.
“Una vez consultada la legislación existente, esta no contempla el transporte de animales, por lo que cada naviera es competente para adoptar las medidas pertinentes mediante normas internas que aseguren en primer lugar al pasaje y en segundo lugar a los animales”, explican los afectados.
Tras esta auténtica odisea se presentó una reclamación ante la propia Naviera y ante Consumo, dependiente de Sanidad, formulando denuncia por todo lo acontecido.
Han tenido que pasar cuatro años de seguimiento a esa reclamación para que se llegue a este oficio, que termina sancionando el trato recibido por la mascota. “Las condiciones de las jaulas apiladas mal sujetas, situadas en una sala de paso junto la bodega donde se transportan los vehículos con exposición a gases y humos; ninguna certificación sanitaria animal de las jaulas...”, recuerda, terminaron integrando una denuncia que ha venido a darles la razón y sirve de ejemplo de lo que no se debe hacer.
Mientras Anko viajaba en esas condiciones, la familia comprobaba cómo algunos pasajeros “se tumbaban ocupando varios asientos con los pies descalzos restregándolos por los asientos, al igual que el mal uso en los servicios donde varios pasajeros se limpiaban los dientes, incluso los pies, pero no pasaba nada, nadie hacía nada”, ejemplifica.
La noche y el día de estos viajes
Las condiciones en que tuvo que viajar Anko han conllevado esta sanción, aunque la misma se emite cuatro años después de lo ocurrido. Situaciones como la vivida por esta familia no se volverán a repetir.
Ellos defendieron a su mascota, un miembro más del hogar, y han obtenido la respuesta. Hoy la situación es diferente, habiéndose mejorado los denominados hotel can de los barcos con la instalación de nuevas jaulas de aluminio, higiénicas, sin riesgo para los animales para que no estén expuestos ni a posibles accidentes ni a intoxicaciones. Hace falta que unos luchen para que se consigan pequeños pero importantes logros.
Y los que tiran los chicles en las aceras?
Los que arrojan papeles y latas desde los coches?
No seas demagogo.
Cuanto más conozco al humano, más quiero a mi perr@.....
Os doy mi mayor enhorabuena por haberlo conseguido. No la contraprestacion económica por los daños morales y emocionales que imagino sufristeis hace cuatro años, sino al menos por unas mejores condiciones para el transporte de mascotas en barco. Yo hace tiempo sufrí algo parecido y precisamente con Balearia, que por mi experiencia muestra total insensibilidad y poca flexibilidad en este tema. Desde entonces dejé de viajar con esta compañía. No hay dinero en el mundo para resarcir injusticias como ésta. Esto sólo lo puede entender quien ama a los animales y tiene la oportunidad y la suerte de haber compartido parte de su vida con un perr@.
Lo que me indigna, es ver el énfasis que se pone en temas como éste del transporte de los perr@ en barco, y que poco se llama la atención, cuando te pasas el viaje soportando chillidos y carreras de niñ@s pasillo arriba, pasillo abajo, ante la indiferencia y mala educación de unos padres que permiten que sus hijos molesten a otr@s de esa manera.
Yo personalmente he vivido varía veces esta situación, de incluso llevando a mi mascota en su transportin, pasar los niños y a modo de juego dar un palmetazo al mismo, para escuchar ladrar a mi perrilla, que asustada o aterrorizada no sabia que pasaba. El animal asustado por tanto alboroto ladra y "molesta". Y claro si dice usted algo le dirán: ¡¡¡¡es que son niñ@s!!!!......Ellos no molestan, mi perr@ SÍ.... tiene bemoles el tema..
Por desgracia ya hace casi 9 meses que tuve que de "dejar marchar" a mi peluda. La recuerdo cada día. La voy a recordar siempre. Es increíble experimentar la cantidad de emociones y sensaciones que despiertan en tu corazón un perr@. Y todas Buenas. Es energía de la pura. Energía blanca y limpia como yo la llamo.
Mi perrita nunca me perteneció. La recogí de la calle y fue de las mejores cosas que hasta ahora me ha regalado la vida. Tuve la suerte de tenerla tres años conmigo y aprendí de ella aptitudes ante la vida que no había visto en ningún humano. Ell@s tienen una capacidad de amor y lealtad inagotables. Pero por eso mismo que digo que nunca me perteneció, mi ....."espíritu libre"........
Tambien se te olvida recoger sus excrementos en la calle cuando caga?
Y el que tira los chicles en la acera?
Y las colillas,?
Y el que arroja desde los coches papeles y latas?
No seas demagogo.
El las playas no te molestan los perros verdad y las colillas te molestan?