El acuartelamiento de ‘El Jaral’ ha acogido la celebración del 216 aniversario del Regimiento de Ingenieros número 7 de Ceuta, descendiente directo y heredero del Regimiento Real de Zapadores Minadores y el más antiguo de todas las unidades del Arma de Ingenieros del Ejército español. El coronel Miguel Ángel Casado se ha encargado en su alocución de remarcar esos apuntes históricos, en un acto en el que se han impuesto condecoraciones al personal que se ha hecho acreedor de las mismas. “Este Regimiento, que se encuentra formado hoy en este patio de armas, es el heredero de aquel primer Regimiento con un historial glorioso, siempre al servicio de nuestra querida Patria. El Regimiento fue, desde su cuartel de Alcalá de Henares, la primera tropa organizada que, marchando a tambor batiente con su Bandera al frente, se sublevó en 1808 contra el ejército francés protagonizando la conocida gesta de la ‘Fuga de Zapadores”, ha explicado Casado Rincón.
Los rastros de los zapadores y minadores marcan buena parte de la historia que este viernes ha sido rememorada entre los presentes. Se hizo mención a actuaciones destacadas durante la Guerra de la Independencia, en expediciones a Dinamarca o Portugal además de en las guerras carlistas. La reina Isabel II recompensó al Regimiento con la concesión del derecho a ostentar en sus Banderas la Corbata de la Laureada de San Fernando, máxima condecoración al valor heroico. En Ceuta, sus rastros han quedado en muchas de las obras y fortificaciones que hacen visible el espíritu de esta fuerza castrense. “Han dejado un imborrable recuerdo de obras y fortificaciones entre las que destacaron, por citar algunas, las baterías de Torremocha, San Antonio, Valdeaguas, Punta Negra, puerta del Hacho y Pintor, las torres de Isabel II y de Mendizábal, los cuarteles del Revellín, de las Eras, el de la Reina y el hospital militar”, ha recalcado el coronel. Los zapadores han sido animados por su máximo responsable a seguir con el legado recibido, estando disponibles y “demandando siempre ser empleados en las situaciones de mayor riesgo y fatiga, siempre al servicio de nuestra querida Patria”. En el acto se ha recordado con especial cariño a los cinco componentes del Regimiento que se encuentran en Túnez y se ha agradecido la presencia de un grupo de antiguos soldados del Regimiento que sirvieron a España formando parte del 4º Remplazo de 1977 y que están celebrando los 40 años desde que se licenciaron. Con un homenaje a los que dieron su vida por España y el desfile de la fuerza ante el comandante general, Javier Sancho Sifre, ha terminado un homenaje en el que han estado presentes la Escuadra de Gastadores, Banda de Guerra Mixta, Música de la Comgeceu, Plana Mayor del Batallón de Zapadores, Compañía de Plana Mayor y Servicios, Compañía de Apoyo y la de Zapadores. En el acto se aprovechó para inaugurar la obra realizada por la ceramista Carmen Navío, a modo de reproducción histórica de las que había en el acuartelamiento Las Eras.
Antiguos soldados del Cuerpo
Llegaron desde Barcelona, Asturias y Madrid, regresando a la ciudad en un momento muy especial reencontrándose con antiguos mandos con los que todavía mantienen contacto.
Tal y como explicaban desde la Hermandad de Veteranos, “algunos han sentido algo extraño en el interior, al salir La Coronela y posteriormente El Estandarte, cosa que en el pasado por su juventud no lo habían detectado. Ahora a los 61 años, aproximadamente, han percibido lo que representa la Bandera y los actos que se desarrollan en su antigua Unidad”, expresaba.
“Al gritar los vivas a España, el Rey y el RING-7 se ha observado alguna que otra lagrimita”, añadió, expresando su agradecimiento por la acogida, “en unos tiempos en los que no es muy normal asistir a actos castrenses”.