Niños con caras de impaciencia pero rebosantes de ilusión, acompañados por sus padres y familiares felices por la alegría que desprendían los más pequeños, esperaban por los alrededores de la Plaza de la Maestranza que la cabalgata en Ceuta comenzara.
Sus Majestades de Oriente no se hicieron mucho de esperar y, tal y como estaba previsto, cuando tan sólo habían pasado unos minutos de las siete de la tarde las carrozas del Cortejo Real que formaban la cabalgata apareció para repartir 4.000 kilos de caramelos e ilusión.
Un grupo de animación formado por duendes de la Navidad eran los encargados de abrir el desfile y dar paso a la primera carroza. Se trataba de la Estrella de la Ilusión, quien tuvo el honor de recibir las llaves de la ciudad a manos de Juan Vivas para entregárselas a los Reyes Magos. Así, estos podían entrar en Ceuta para repartir los regalos por todos los hogares de la ciudad.
Tras la carroza de la Estrella, el alumnado de la academia Allegro, interpretaban unos espectaculares pasos de bailes. A este grupo los seguía la carroza del pesebre.
La siguiente carroza era la del Heraldo Real, aunque antes se encontraban situadas en el desfile las alumnas de la academia Maite Rivas para deleitar a todos con sus movimientos de baile.
Por su parte, las integrantes de la academia de baile Afri Lirio iban detrás de la carroza del Heraldo y daban paso a la primera carroza de los Reyes Magos.
Se trataba de Melchor, quien presidía una preciosa carroza decorada en tonos dorados. Desde su trono, saludaba a todos los niños que gritaban su nombre de forma efusiva para llamar su atención. Después de Melchor aparecieron las alumnas de la academia Lesmes con sus bailes preparados para la ocasión.
A continuación estaba la carroza de Gaspar, acompañado de sus Pajes y repartiendo caramelos y sonrisas a pequeños y mayores.
La quinta academia que participaba en el desfile era la de Rosa Founaud. Sus alumnas pusieron un toque especial en este desfile.
Así llegamos hasta la última carroza, la del Rey Baltasar, que lanzaba miradas de complicidad a todos los niños que lo llamaban.
Por último, la Banda de La Encrucijada era la encargada de poner el punto y final a la cabalgata de este año, que recuperada su formato habitual. El recorrido comenzó en la Plaza de la Maestranza y llegó hasta el Paseo de las Palmeras, concluyendo en la avenida González Tablas.
Totalmente de acuerdo con esta persona!!!! De cualquier otra fiesta, menos de Navidad y por Dios más villancicos que es lo que pega en estas fechas!!!!!
Las carrozas eran horribles de feas, para halloven y carnaval tal vez, pero no para una navidad. En cuanto al tema de las academias de baile fue bastante cansino y soporifero . Todos los años lo mismo aburre. A ver si cambiamos el chip y las ideas.