Imaginaos la distancia social para los niños y niñas; la soledad de los mayores; la incertidumbre laboral; el estrés de nuestros enfermeros y enfermeras.
A falta de datos oficiales, no cabe duda de que los límites de la salud mental se han visto tensionados por la pandemia del COVID-19, y su circunstancia.
En este escenario, la Reina Letizia ha querido acercarse a los locales de Salud Mental España para entablar una reunión de trabajo, y conocer de primera mano el alcance de la afectación, y nuestra capacidad de respuesta.
A tal efecto, he podido participar en una videoconferencia, junto a mis compañeros de la Comisión Permanente, y donde cada uno hemos expuesto un enfoque de los acontecimientos.
Primero, una visión general de nuestro presidente, Nel González Zapico, donde se destaca el compromiso de adhesión a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y nuestra vocación de liderazgo en Salud Mental.
Al tanto, el representante de Cataluña, Josep Aguilar, ha explicado el soporte emocional que han supuesto en su tierra los grupos autoayuda, y a pesar de la brecha tecnológica.
Después, Ignacio Fernández, desde Cantabria, ha descrito el buen funcionamiento del dispositivo de tele asistencia gratuito durante la fase más aguda en su región.
Elena Briongos y su equipo, de Castilla y León, son los precursores del programa de asistencia personal entre iguales, llegando incluso a lo más recóndito del mundo rural.
El turno de Rosa Bayarri, Comunidad Valenciana, era para poner en valor la Guía de Recomendaciones para Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y miembros de las Fuerzas Armadas, ya que el confinamiento podría dar lugar a situaciones difíciles de manejar. A continuación, Celeste Mariner, nuestra Directora Ejecutiva, hizo una aplicación de nuestras líneas Estratégicas, teniendo en cuenta la realidad sobrevenida. También es importante seguir colaborando con la Estrategia Nacional de Salud Mental, y ahondar en la Estrategia de Comunicación, como las desarrolladas con la MTV o Instagram. El despliegue de una Plan de Adecuación Ética nos pondrá en una situación ventajosa.
Y Féliz Pena, tesorero, y desde Galicia, advirtió del desafío de la financiación y la modernización de nuestras estructuras para responder a un entorno cambiante y exigente. Recordó, asimismo, la tarea pendiente de un plan de prevención del suicidio.
Al final, obtuve la palabra para presentar la temática del Día Mundial, bajo el lema: Salud Mental y Bienestar: una prioridad global. Es momento de poner el foco en la salud mental, en toda su extensión, para lograr un acceso universal y equitativo a los servicios de atención y prevención.
Hablar de salud mental es hablar de bienestar, y el poder transformador, que es la política, ha de proporcionar los recursos indispensables para que la identidad de esos dos términos, bienestar y salud mental, se materialice.
Por lo demás, tuve el honor de leer el manifiesto de este año, elaborado por el Comité Pro Salud Mental En Primera Persona, y por la Red Estatal de Mujeres de la Confederación.
Y me despedí, no sin remarcar que tenemos ganas de trabajar, de prestar nuestro conocimiento y nuestra implantación, para lograr ese horizonte que es el bienestar.
Verdaderamente, es de agradecer que la máxima representación del Estado acuda a tu casa para saber e interesarse por la salud mental.