Rescatados 21 inmigrantes que quedaron a la deriva

Guardia Civil y Salvamento Marítimo trabajaron ayer juntos en las tareas de rescate de 21 inmigrantes que a bordo de tres balsas habían quedado a la deriva en alta mar.

Todos los inmigrantes, de origen subsahariano, varones y mayores de edad -algunos acababan de cumplir los 18 años-, llegaron a las dependencias de la Guardia Civil en el Puerto Deportivo en perfecto estado de salud y fueron conducidos a la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y luego al CETI.
Primero llegaron doce, quienes fueron rescatados a bordo de dos balsas -siete en una y cinco en otra-. Después llegaron los nueve restantes que iban en una tercera. Aunque fueron avistados con bastante tiempo de diferencia, los servicios de salvamento piensan que las tres balsas salieron de madrugada y a la misma hora desde Marruecos, pero la fuerte corriente reinante durante la madrugada hizo que las tres embarcaciones de plástico quedaran a la deriva a una importante distancia.
El primer rescate se produjo sobre las ocho de la mañana. El Servicio Marítimo de la Guardia Civil fue el primero en salir al rescate de los doce inmigrantes que viajaban en dos balsas neumáticas. Estaban dos millas al norte de Punta Leona. La Benemérita estuvo un tiempo junto a las dos embarcaciones debido a que en principio parecía que iba a recogerlos la patrullera marroquí. Finalmente no fue así y los rescató la Guardia Civil. Seguidamente llegó la Salvamar ‘Gadir’, que se hizo cargo del traslado de los inmigrantes hasta las dependencias de la Guardia Civil en el Puerto Deportivo. Aquí, los agentes de la Benemérita tomaron la filiación de los inmigrantes. La mayoría eran de Costa de Marfil, pero también había de Mali.
Poco después de que la Policía Nacional recogiera a estos doce inmigrantes en dos furgones, comenzó un nuevo rescate, otros nueve subsaharianos, lo que sumaba un total de 21.
En esta ocasión, la Salvamar ‘Gadir’ iba camino de Algeciras detrás del ‘Avemar Dos’, de Balearia, cuando éste se desvió de su ruta. Entonces los miembros de Salvamento Marítimo pensaron que podría haber visto algo. Poco después recibieron la llamada de que el ‘Avemar Dos’ se encontraba junto a la tercera balsa, en la que viajaban nueve inmigrantes. El rescate fue rápido y se llevó a cabo con total normalidad debido a que el mar estaba en calma y el viento ya había caído. Una vez a bordo de la ‘Gadir’, los inmigrantes fueron llevados también a las dependencias de la Guardia Civil en el Puerto Deportivo, donde dieron su filiación a los agentes y fueron recogidos por el Cuerpo Nacional de Policía.
Aunque se encontraban en buen estado de salud, estos inmigrantes estaban más mojados y cansados que los primeros debido a que habían estado más tiempo en alta mar. Debido a la corriente y al tiempo de espera en alta mar, la balsa apareció en un lugar diferente al que fueron encontradas las otras dos, a unas cuatro millas de Ceuta.
El número de inmigrantes llegados a Ceuta había descendido los últimos días de agosto y primeros de septiembre. Tras dos semanas sin entradas, la madrugada del pasado domingo día 11, la Guardia Civil rescató a seis subsaharianos que estaban a la deriva a bordo de una balsa neumática. Esta fue la primera llegada del mes de septiembre.
Con los dos rescates de ayer ya son 27 los inmigrantes que han sido recogidos y llevados a suelo ceutí, una cifra que dista bastante de la registrada durante los últimos meses.  En junio llegaron 127 inmigrantes, en julio 308 y en agosto más de 200.

Las caras del drama

Algunos inmigrantes llegaban a las dependencias de la Guardia Civil en el Puerto Deportivo con rostros de cansancio. No era para menos ya que acababan de dejar atrás  varias horas a la deriva tras tirarse al mar en tierras marroquíes a bordo de balsas neumáticas. Los inmigrantes se echaban las manos a la cabeza y lamentaban ser víctimas del drama de la inmigración. Dos de las tres balsas que se echaron al mar en Marruecos aparecieron en las primeras horas de la mañana, los que viajaban en la otra tuvieron que esperar algo más.

Un subsahariano los desinfla

En la imagen, un subsahariano desinflando los flotadores que llevaban. Algunos inmigrantes que fueron rescatados ayer llevaban también chalecos y remos para guiar las pequeñas embarcaciones.

Durante la mañana llegaron 21 subsaharianos

Es la fría cifra de la inmigración. Un número que ocupa titulares de prensa y que esconde detrás las vidas de quienes se echaron al mar para intentar conseguir una vida mejor. En ocasiones, desgraciadamente algunos no llegan a contarlo, porque sus vidas se las traga el mar. En otras, afortunadamente, son rescatados y llevados a tierra firme, donde comienzan una nueva etapa. En la jornada de ayer fueron 21 los inmigrantes rescatados. Doce de ellos llegaron a primera hora de la mañana, y los otros nueve algo más tarde debido a que la embarcación en la que viajaban fue descubierta después. Finalmente fueron rescatados y llevados hasta las dependencias de la Guardia Civil, al igual que sus otros compañeros. En la imagen se puede ver a los primeros inmigrantes que fueron rescatados en la mañana de ayer. Sentados esperaban su turno para dar sus datos a los agentes de la Benemérita.

Pequeñas embarcaciones de plástico

Los inmigrantes viajaban, como es habitual, en pequeñas embarcaciones de plástico. En la imagen aparecen los miembros de Salvamento Marítimo bajando a tierra las dos primeras embarcaciones rescatadas. Más tarde aparecería otra más. En una de estas pequeñas balsas llegaron a viajar ayer hasta nueve subsaharianos, poniendo así en peligro sus vidas con el objetivo de llegar a suelo español. Gran parte de los inmigrantes que llegaron este verano a Ceuta lo hicieron a bordo de balsas, otros tantos lo hicieron a nado.

Ayudó en la filiación

Uno de los subsaharianos, el que aparece en la imagen, ayudó a los agentes de la Benemérita a tomar la filiación a los doce primeros inmigrantes que fueron trasladados a las dependencias de la Guardia Civil. Vestía una camiseta del Liverpool. Las camisetas de fútbol también son habituales entre los inmigrantes que llegan.

Ya en tierra, ¿y ahora qué?

Los subsaharianos se comunicaban entre sí en las dependencias de la Guardia Civil. Mientras unos daban su filiación a los agentes de la Benemérita, otros se cambiaban o esperaban hablando su turno. En la imagen aparecen dos subsaharianos que conversan mientras esperan su turno para dar sus datos a los agentes de la Guardia Civil. Al fondo, otros compañeros que ya han dado su filiación, esperan a ser recogidos por la Policía Nacional.

Comunicados desde el primer momento

La mayoría de los inmigrantes que fueron rescatados en la mañana de ayer portaban teléfonos móviles. Nada más llegar, los desenvolvieron y los pusieron en funcionamiento.