Repercusiones y factores de riesgo en el día mundial del alzheimer

La Consejería de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad se ha sumado un año más a la conmemoración del día mundial del alzheimer, que se celebra mañana sábado, jornada  con la que se pretende difundir un mejor conocimiento de la enfermedad, apoyar a los enfermos y a sus familias y concienciar sobre sus graves repercusiones individuales, familiares y sociales. En esta ocasión, el lema escogido por la Confederación Española de Alzheimer es #Evolución, con el que se recalca la importancia de tomar conciencia de la necesidad de conocer cómo cambia el entorno y cómo se deben afrontar las nuevas necesidades que van surgiendo, relacionadas con las demencias, el cuidado y la atención a quienes las sufren.

A la asistencia de las personas afectadas por padecer la enfermedad y sus cuidadores, afrontar el impacto de la dolencia y sensibilizar a la opinión pública sobre la carga personal, familiar y social para atender a estos enfermos, el Gobierno de la Ciudad, a través de la Consejería que dirige Javier Guerrero, destina 635.000 euros, que se distribuyen entre las tres entidades que trabajan con estos usuarios a través de diversos programas para facilitar el respiro familiar, mejorar la calidad de vida de los usuarios y promover el máximo grado de independencia personal: la Asociación de Familiares de Alzheimer, con 215.000 euros; la Fundación Eduardo Gallardo, con 260.000 euros; y Cruz Roja, a través del Centro de Día, con 160.000 euros. En total, mediante estos convenios de colaboración se presta atención a unos 220 usuarios.

Desde 1994

Esta jornada de concienciación se celebra cada 21 de septiembre desde 1994, instituida por la Organización Mundial de la Salud, y auspiciada por la Federación Mundial de Asociaciones de (en inglés Alzheimer´s Disease Internacional, ADI). Según la Confederación Española de Alzheimer, la patología afecta a más de 4,5 millones de personas en España, entre quienes la padecen directamente y sus familiares y cuidadores, y está considerada como la epidemia del siglo XXI, con entre un 30 y un 40 % de casos sin diagnosticar. Además, en  2012, la ADI escogió septiembre como el mes del Alzheimer tanto para generar conciencia social como para combatir el estigma que la rodea.

Se trata de un trastorno degenerativo cerebral que afecta gravemente la capacidad de una persona para llevar a cabo sus actividades diarias y se caracteriza por el deterioro de la función cognitiva. La enfermedad ataca la memoria, el pensamiento, la orientación, la comprensión, el cálculo, la capacidad de aprendizaje, el lenguaje y el juicio. El deterioro de la función cognitiva suele ir acompañado por el deterioro del control emocional, el comportamiento social o la motivación.

Según datos de la OMS la demencia afecta a nivel mundial a unas 50 millones de personas, de las que alrededor de un 60 % viven en países con ingresos medios y bajos, y cada año se registran cerca de 10 millones de nuevos casos. Se prevé que el número total de personas con demencia alcance los 82 millones en 2030 y 152 millones en 2050.

Actualmente no hay ningún tratamiento que cure la demencia o revierta su evolución, pero se están investigando nuevos que se encuentran en diversas etapas de ensayos clínicos.

Aunque la edad es el principal factor de riesgo de demencia, esta enfermedad no es una consecuencia inevitable del envejecimiento. Además, diversos estudios demuestran que se puede reducir el riesgo de padecer demencia haciendo ejercicio con regularidad, no fumando, evitando el uso nocivo de alcohol, controlando el peso, teniendo una alimentación saludable, y manteniendo unas cifras adecuadas de tensión arterial, colesterol y glucosa.