Una compañía de Regulares de Ceuta ha participado este mediodía en el acto de celebración del Día de las Fuerzas Armadas, que ha tenido lugar en Guadalajara.
Durante el desarrollo de la celebración, el Rey ha elogiado la labor diaria de los militares por la seguridad y la libertad de los españoles. Este acto ha retomado su brillantez, con desfiles aéreo y terrestre, y que ha servido de homenaje a las víctimas del Yak-42.
Con casi 15 minutos de retraso sobre el horario previsto, Felipe VI, acompañado por doña Letizia, llegaba a la calle Camilo José Cela, para presidir la parada militar, con la participación de unos 2.500 militares, con carros de combate, blindados y aeronaves.
La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, y la nueva cúpula militar han asistido por primera vez a este acto, que tras cuatro años consecutivos celebrándose en Madrid por motivos de austeridad, ha tenido lugar en Guadalajara.
Hoy, con el doble de presupuesto que el pasado año, ha retomado el espectáculo del desfile aéreo, con 63 aviones y helicópteros, entre ellos el avión de transporte A400M, y terrestre, con 160 vehículos, incluidos carros de combate Leopard y vehículos blindados Pizarro.
Miles de personas han presenciado el desfile que se ha desarrollado con fuertes medidas de seguridad, con numerosa presencia policial, y altas temperaturas, más propias de agosto.
El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, el alcalde de Guadalajara, Antonio Román, el jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), Fernando Alejandre, han asistido al acto.
También los jefes de Estado Mayor del Ejército, general Francisco Javier Varela; de la Armada, almirante general Teodoro López Calderón, y del Ejército del Aire, general Javier Salto, y diversas autoridades civiles y militares.
A su llegada, el Rey ha recibido honores de ordenanza y ha pasado revista a un batallón de honores de la Guardia Real.
A continuación se ha izado la bandera, que ha sido bajada desde los cielos por un paracaidista, y ha comenzado el homenaje a los fallecidos en acto de servicio, con la intervención de familiares de seis de ellos.
Entre ellos, los familiares de los militares Juan Bonel Suárez, subteniente del Ejército de Tierra, y del sargento del Ejército del Aire Francisco Javier Cardona Gil, que murieron en el accidente del Yakolev-42.
También los familiares del teniente del Ejército del Aire, Saúl López Quesada, fallecido en el segundo accidente del SAR; del subteniente Juan Morales Parra, que perdió la vida en el accidente del Cougar; y del capitán de navío Domingo Olivo Esparza y del cabo primero de la Guardia Civil Aurelio Salgueiro López, fallecidos en actos terroristas.
Este momento, con el Rey depositando la corona de flores en un monolito, ha sido uno de los más emotivos del acto y se ha desarrollado bajo los acordes de "La muerte no es el final", fuego de fusilería y la pasada de la patrulla Aguila, dejando los colores de la bandera sobre los cielos de Guadalajara.
Al finalizar el acto, los Reyes se han acercado a saludar personalmente a los familiares de las víctimas.
En el desfile aéreo han participado aviones cazas F-18 y Eurofighter, así como el A400M, que se exhibe por primera vez.
La flotilla de aviones oficiales del Gobierno y aviones de lucha contra los incendios Canadair han precedido a helicópteros del servicio aéreo de rescate del Ejército del Aire, de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra, de la Armada y del Servicio Aéreo de la Guardia Civil.
A continuación, el desfile terrestre, con el paso de unidades motorizadas, entre las destacaron vehículos de alta movilidad táctica y vehículos Piraña de la Armada, secciones mixtas de motocicletas y de vehículos de tráfico y seguridad ciudadana de la Guardia Civil, una unidad de vehículos de la Unidad Militar de Emergencias, así como carros de combate Leopard, vehículos de combate Pizarro y artillería autopropulsada pertenecientes al Ejército de Tierra.
Posteriormente desfilaron agrupaciones a pie compuestas por un Grupo de Honores de la Guardia Real, un Batallón Mixto de la Armada, un Batallón Mixto del Ejército del Aire, un Batallón de Alumnos de la Guardia Civil, una compañía de la Unidad Militar de Emergencias y una Batallón Mixto del Ejército de Tierra.
Ha cerrado el desfile un Batallón Mixto de paso específico del Ejército de Tierra formado por dos compañías de la Legión con sede en Viator (Almería) y una de Regulares de Ceuta.
Como es habitual, los legionarios han sido los más aplaudidos, aunque en esta ocasión han desfilado con un perro como mascota, sustituyendo a su tradicional carnero o cabra.