Los efectivos de Salvamento Marítimo tuvieron que realizar un total de cuatro salidas en las que consiguieron rescatar a 21 inmigrantes subsaharianos. Todos ellos eran jóvenes, mayores de edad y, aparentemente, sin problemas de salud. Definitivamente se pone fin a la relajación de la presión migratoria.
El día de ayer fue el de la confirmación de la vuelta de la presión migratoria sobre Ceuta. Si durante las últimas semanas la situación se había calmado e incluso habían dejado de llegar indocumentados a las costas caballas, en los cuatro últimos días han sido más de una treintena los que lo han conseguido. Entre Salvamento Marítimo y la Guardia Civil consiguieron rescatar ayer a un total de 21 jóvenes subsaharianos, afortunadamente todos ellos en aparente buen estado de salud. Iban distribuidos en diferentes barcos de plástico, casi de juguete, que fueron siendo interceptadas a lo largo del día.
La primera de las intervenciones la realizaron los efectivos de la Benemérita a las 8.00 horas. Se trataba de una balsa a la deriva con seis personas. Salvamento comenzó a buscarla sobre las 5.00 horas, ya que habían detectado su presencia en aguas ceutíes. El problema era que salieron a su encuentro y no hallaban la pequeña embarcación. Tres horas después del inicio de la búsqueda consiguieron dar con los inmigrantes.
El segundo de los rescates tuvo lugar aproximadamente dos horas más tarde y la llevó a cabo la Salvamar ‘Gadir’. En este caso consiguieron recoger a cuatro subsaharianos, todos ellos muy jóvenes, que se encontraban a la deriva a 13,5 millas náuticas al nordeste de Ceuta, es decir, aproximadamente a 23 kilómetros de la costa local. Fue el buque marcante ‘Malou Theresa’ el que avistó la embarcación a 8 millas de la ciudad autónoma y alertó a los efectivos de Salvamento Marítimo. Según fuentes oficiales, dos de los cuatro inmigrantes había dos que presentaban signos indiciarios de hipotermia. Los miembros de la ‘Gadir’ les proporcionaron ropas limpias y abrigos, logrando con ello que se recuperasen antes de llegar al puerto deportivo a las 10.30 horas, donde aparentaban estar en buen estado de salud. De hecho, los miembros de la Cruz Roja realizaron las habituales comprobaciones y protocolos sin detectar ninguna anomalía.
La tercera de las embarcaciones fue rescatada también por la Salvamar ‘Gadir’. Todavía no se había recuperado del esfuerzo de la primera de las balsas cuando el ferry ‘Jaume I’ avistó una nueva embarcación cargada de inmigrantes que estaba a la deriva. No habían dado las 12.00 horas cuando la Salvamar ya estaba de regreso junto a los seis inmigrantes que intentaban alcanzar las costas españolas. Una vez más el patrón era el mismo: todos jóvenes y todos varones subsaharianos. Esta vez eran localizados a seis millas al norte de Ceuta.
La cuarta salida del día la volvió a hacerla también la Salvamar ‘Gadir’. En esta ocasión eran cinco los los inmigrantes indocumentados que viajaban en una balsa de plástico poco consistente. De nuevo se les detectó en la bahía norte, cuando intentaban alcanzar la costa española. En esta ocasión los subsaharianos se mojaron más de lo habitual, ya que llevaban mucha agua dentro de la pequeña embarcación, aunque de nuevo ninguno de ellos presentaba problema alguno de salud.
Con estas nuevas llegadas se confirman dos cuestiones. La primera es que los intentos de llegar a Ceuta se han reactivado y la segunda que el itinerario preferido ha dejado de ser la bahía sur, ya que la totalidad de los intentos registrados últimamente han sido por el norte.
En todo el mes han entrado 187
El inicio del mes de agosto hacía presagiar un mes difícil a nivel de presión migratoria. En los diez primeros días se superaban los números del mes de junio completo y se alcanzaba casi la mitad que en julio. Finalmente, tras un parón de once días, las cifras se han relajado, aunque siguen siendo mayores que al inicio del verano. Según los datos publicados, en el mes de junio arribaron a Ceuta un total de 123 inmigrantes; en julio los números se dispararon y se alcanzaron los 308 extranjeros indocumentados; en lo que llevamos de agosto la llegada de subsaharianos se coloca en 187, aunque es bien cierto que la colaboración por parte de las autoridades marroquíes ha dado sus frutos y se tiene conocimiento de que en más de una ocasión se había evitado la entrada de grupos de aproximadamente cuarenta inmigrantes. Éste parece haber sido el motivo por el que la presión se ha trasladado desde la bahía sur a la norte.
A pesar de todo, el buen tiempo que todavía acompaña a Ceuta hace presagiar más intentos por parte de los subsaharianos, que a buen seguro apurarán todas sus posibilidades para intentar alcanzar las costas españolas y una nueva vida.
La segunda balsa iba muy rápido
La segunda de las balsas rescatadas en el día de ayer viajaba a una velocidad muy alta, teniendo en cuenta sus condiciones. Según cálculos de Salvamento, aproximadamente viajarían a un equivalente de diez kilómetros por hora. Eso habría provocado que, a pesar de ser avistado a ocho millas al noroeste de Ceuta, cuando fueron a rescatarles estuvieran a 13,5 millas de la costa. La corriente y el viento serían sus motores.
Colaboración entre España y Marruecos
La presencia de dos patrulleras marroquíes en la bahía sur y de otra en el norte, han sido muy útiles para frenar el paso masivo de inmigrantes hasta España en las últimas semanas. Este operativo se complementa con un protocolo de actuación entre España y Marruecos que se activó hace menos de un mes.El funcionamiento consiste en que cuando la Guardia Civil detecta balsas o movimientos de inmigrantes en el lado marroquí a través de sus sistemas se ponen en contacto con las autoridades marroquíes y éstas se hacen cargo. Además, se están haciendo batidas en el monte para disuadir a los inmigrantes.
Dos de ellas eran idénticas
Desde el año pasado es habitual que los inmigrantes se hagan a la mar en pequeñas embarcaciones de plástico de corte no profesional y con poca consistencia. Lo que no es tan habitual es que dos de los grupos de inmigrantes encontrados utilicen balsas de la marca ‘INTEX’ de color gris, con unas franjas azules y amarillas recorriendo el borde la embarcación y letras amarillas. ¿Casualidad o mismos proveedores?
Pantalones de equipos de fútbol
La mayoría de los inmigrantes que ayer llegaban a las costas ceutíes traían las ropas mojadas. Como suele ser habitual, entre los efectivos de la Benemérita, Salvamento y Cruz Roja les facilitaron ropas de abrigo deportiva y zapatos. De esta forma reemplazaban las prendas que utilizaron para llegar a aguas españolas. Unas prendas que contienen un dato curioso: muchas de ellas eran de grandes equipos del fútbol europeo. Manchester United, Inter de Milán y Chelsea lucían en pantalones, calzonas e incluso petates. Evidentemente, los subsaharianos también conocen las marcas deportivas más prestigiosas, y por ello lucían zapatos Adidas y Reebok, e incluso pantalones Nike. Elementos de vestir que sin duda contrastaban muchísimo con los salvavidas de color anaranjado fuerte que también utilizaban por si la embarcación se fuera a pique.
Es sabido por todos que las prendas de vestir de imitación de Marruecos, particularmente la de la zona de Castillejos, resulta muy barata, quizá por ello los inmigrantes las tenían.
La ropa que tras el rescate se les facilitó también es deportiva, aunque ni rastro de marcas de prestigio. Simplemente efectividad, ya que necesitan calor después de la arriesgada travesía que han realizado.