Regino Hernández nació en Ceuta, ha pasado casi toda su vida en Málaga y está afincado en Sierra Nevada (Granada). Desde que ha entrado en la élite del snowboard, lo que crea cierta ‘controversia’ a la hora de designarle una procedencia o, como vulgarmente se dice, ‘barrer para casa’.
El joven ‘rider’ asegura al otro lado del teléfono desde Italia, en donde consiguió esta semana el título en snowboardcross en los Campeonatos Mundiales Juniors, que sí, que es cierto que su corazón está repartido pero que no duda en sentirse en parte ceutí. Aclarado este punto, respondió a nuestras preguntas:
–¿Con que sensaciones se queda después de haber conseguido el título mundial junior?–Ha sido impresionante. Veníamos con la intención de optar al título, pero tras perder la maleta en Madrid, con mi tabla y todo, se nos puso todo un poco más difícil. Pero fuimos luchando poco a poco, hasta que conseguimos el título. Estamos muy contentos.
–Es la primera vez que un ‘rider’ español se hace con la victoria en un Mundial en esta categoría ¿Esto le añade más ‘salsa’ al logro conseguido?–La verdad es que es un dato que no conocía, hasta que me lo fueron comentando. Para mí es un orgullo ser el primero en llevar a España a lo más alto.
–Todos los deportistas compiten con la intención de conseguir el título pero, ¿de verdad llegó a pensar que lo podría lograr?–La verdad es que no me lo llegué a plantear de verdad, pero sí es cierto que uno siempre sueña con llegar al podium. De todos modos sabíamos que ésta era mi última partipación en categoría junior, por lo que nos pusimos el listón más alto. De todos modos, nuestro principal objetivo era hacerlo lo mejor posible.
-España no es una potencia mundial en snowboard pero, ¿ha subido un escalón a nivel internacional gracias a su logro?–Gracias a mí creo que no, es a todas las personas que han trabajado para ello. Ha subido porque hace cinco o seis años era un deporte desconocido y casi no se practicaba. Gracias al trabajo y al hacer de otros ‘riders’, el snowboard español está creciendo y sube el nivel. Así la gente empieza a saber que este deporte existe.
–El año pasado compitió en las Olimpiadas en Vancouver y ahora ha ganado el Mundial Junior, ¿va todo demasiado rápido?–La verdad es que lo de la Olimpiada sí que fue un poco rápido, porque ni siquiera estábamos luchando por estar ahí. Pero una vez que hubo posibilidades, sí fuimos a conseguir los puntos. Creo que rápido nunca va. Puedes esperártelo o no, pero todo va a la velocidad que uno quiere.
–Ha conseguido la clasificación en el Half Pipe, pero su especialidad es el cross...–Es cierto que desde chico me ha gustado más el crosss. Las opciones a podium son muy complicadas. Aquí hay mucho nivel. Pero vamos a intentar hacerlo lo mejor posible para conseguir un buen resultado.
–¿Después de lograr un título nota si los rivales le miran de forma diferente?–La verdad es que sí. Mi entrenador ya me lo decía, que siempre que se viene a una competición de este tipo tanto tu equipo como tus rivales saben cuáles son los más fuertes. Ya sabíamos que teníamos opciones de hacerlo muy bien, y los otros equipos también. Y sí, después de que uno dé la sorpresa, es verdad que te miran de otra manera.
–¿Tiene más presión ahora con el título ‘debajo del brazo’?–La presión siempre la tienes. El snowboard es un deporte en el que la presión esté ahí, en cualquiera de las modalidades. En general en el deporte hay presión, y hay gente que sabe llevarlo mejor que otra. Yo lo intento en cada prueba en la que participo.
–¿Y hasta dónde está dispuesto a llegar Regino Hernández?–Todo el que se dedica a un deporte en concreto y se especializa lo que quiere es llegar a ser el mejor. Tanto futbolistas, como jugadores de baloncesto y todos los demás, el que trabaja es para hacerlo lo mejor posible.
–¿Ha recibido muchas felicitaciones desde España?–Desde luego que sí, tanto desde mi casa en Málaga, como mi otra casa en Sierra Nevada y mi familia en Ceuta. Ha sido mucho más de lo que me esperaba. No sabía que tanta gente se fuera a enterar de todo esto.
–¿Estaría dispuesto a venir a Ceuta para recoger el premio al mejor deportista?–La verdad es que una lucha que siempre hay. Unos dicen que soy granadino porque estoy en Sierra Nevada, y otros malagueño porque he pasado muchos años allí, y en Ceuta dicen que soy ceutí. Yo me siento un poco de todas partes. Nací en Ceuta, pero desde que tengo un año viví en Málaga y paso mucho tiempo en Sierra Nevada. Para mí son mis tres casas, y si me premiasen en Ceuta estaría encantado de recogerlo, de eso no hay duda.