El
Gobierno de Ceuta está realizando distintas apreciaciones dentro de los
presupuestos de este año para intentar arañar, en todo lo posible, de varias partidas para que ese dinero que se podría considerar sobrante o no de máxima prioridad pueda dedicarse a esas ‘cuentas de guerra’ que deberán ser sometidas a un pleno de la Asamblea a través de la fórmula de un expediente de modificación de crédito.
Vivas estableció que se encontraron nuevos fondos como, por ejemplo, los créditos que se solicitaron el pasado 11 de abril y donde se presentaron numerosas entidades bancarias llegando a ofrecerse mucho más dinero del que solicitó el Gobierno de
Vivas. Otra pata del banco son los 25 millones de euros que anunció el Ministerio de Hacienda que recibirá Ceuta por parte de los fondos aprobados por el Gobierno y que no son reembolsables. Y anunció el mismo presidente que estaban buscando otras fórmulas para seguir sumando.
Y es que las distintas Consejerías recibieron hace más de un mes la orden de reestructurar sus diversas partidas e intentaran priorizar para lograr la recuperación de fondos que ya aparecen en las cuentas públicas de este año. Pues bien, en ese trabajo realizado, aproximadamente, se puede redirigir un total de unos cuatro millones de euros. La Consejería que más aporta en este apartado es la de Educación y Cultura porque tiene la posibilidad de reconducir los gastos de distintos festejos que no se celebrarán este año como es el caso de los festejos patronales, o actividades como San Antonio, la noche de San Juan o la Virgen del Carmen. Alrededor de un millón de euros consiguió esta Consejería.
De todas maneras, el mismo Vivas aludió a que los replanteamientos no solamente serán hasta finales de año sino que la intención es efectuar un planteamiento plurianual “porque los efectos de la crisis los seguiremos teniendo tanto en 2021 como seguramente en 2022”. Asintió a que con la inyección que se va a recibir por parte del Estado “la cual es importante, que nadie piense que todo está resuelto ni mucho menos”. Quiso defender que ellos realizaron sus proyecciones en función de los diferentes escenarios que se pudieran encontrar y que por esta razón calcularon que a final de año podrían encontrarse con un déficit aproximado entre los 20 y los 23 millones de euros, pero que “hasta que no se ha confirmado por parte del Estado el dinero que se recibirá no podíamos comenzar a efectuar ese replanteamiento concreto de los presupuestos de este año”. Confirmó que el fondo creado por el Estado es procurar la sostenibilidad de las administraciones públicas por los gastos derivados durante los meses de lucha contra el
COVID-19, pero, en ningún momento, “el dinero que se recibirá tiene un carácter finalista”.
Una situación que será mucho peor que la crisis de inicios de la presente década
El propio presidente Vivas ha mencionado en varias ocasiones que nunca ni como funcionario ni como servidor público ha visto situación más difícil que la que se está viviendo en estos momentos. Por otro lado, desde sus primeras comparecencias en el mes de abril, ya advirtió que lo que vendría después del Estado de Alarma será muy duro en todos los conceptos. Por tanto, quiere tener preparado todo para que no haya ningún tipo de sorpresa para los próximos meses bajo ningún concepto.