Una redada contra una presunta banda de traficantes degeneró anoche en enfrentamientos violentos en la ciudad de Marruecos de Marrakech y se saldó con la muerte de un miembro del grupo y un agente policial en coma.
Según la Dirección General de Seguridad Nacional (DGSN), agentes de policía se presentaron en el barrio de Sidi Yusef Ben Ali, reputado entre los más peligrosos de Marrakech, con un mandato de arresto de una persona, pero, tras su detención, recibieron una lluvia de pedradas por parte de unas 200 personas que trataban de liberar a su compañero.
Ante el ataque, el jefe de la brigada practicó varios "disparos de advertencia" antes de ser alcanzado con una piedra en la cabeza que lo dejó en coma, se indica en un comunicado.
Como resultado del enfrentamiento, uno de los presuntos delincuentes murió por un balazo y seis agentes policiales más resultaron heridos de diversa consideración.
La operación policial no tuvo ningún ingrediente político ni social, según aclararon a Efe fuentes de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos en la ciudad.