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Javier Arnáiz ya es el director de la obra de la Antigua Estación
Ya es oficial. El arquitecto municipal Javier Arnáiz es el nuevo director facultativo de la obra de la antigua Estación de Ferrocarril. Su objetivo es recuperar el tiempo perdido y que, de una manera definitiva, esta inversión se pueda encauzar de una vez por todas para que se termine en un plazo que será superior al año y medio aproximadamente.
No tiene un panorama muy halagüeño por delante. Pasaron los cinco meses que tenía la empresa Dragados para realizar la primera fase y lo cierto es que allí poco se ha avanzado junto con la polémica abierta con los partidos de la oposición.
Esta primera fase tenía un presupuesto algo superior al millón cien mil euros. Y básicamente, casi todo el presupuesto se concentraba en la construcción de un hangar que permita que la máquina locomotora esté a cubierto. Ese hangar es el que, por lo visto, ha venido construyendo la empresa Dragados fuera de Ceuta y cuando las piezas se trasladen aquí, se producirá su montaje. Los primeros movimientos de Arnáiz irán en el sentido de proceder a la limpieza de la antigua locomotora, la cual presenta un aspecto lamentable y, con posterioridad, que Dragados instale el hangar. De esa manera, se habrá dado cumplimiento a la exigencia que había ordenado el Ministerio de Fomento para que se cumpliera una parte del proyecto que no se había ejecutado y para la que incluso pidió la devolución del dinero.
Luego, se necesitará una segunda actuación que se concentrará ya en la tabicación interior, a través de los usos que se pretende dar que hasta el momento son la nueva sede de la Fundación Premio Convivencia, por un lado, y una sala de lectura, por el otro.
La decisión de que sea Javier Arnáiz el que se haga cargo de la dirección de esta obra ha sido una petición expresa del mismo presidente Vivas, ya cansado de muchos años de espera y que se haya producido un atasco sin que nadie haya sido, hasta el momento, capaz de encontrar una solución.
Se aprovechó una petición expresa de la dirección facultativa, realizada por un conocido estudio de arquitectos de Madrid, para llegar a un acuerdo económico y entregar todos los bártulos al arquitecto municipal.