Recordatorio a los que juramos la bandera

Vaya el recordatorio de un “simple soldado de infantería” y después oficial de la reserva voluntaria, por si todavía hay gente con coherencia TOTAL a sus promesas y/o juramentos, a aquellos valores que los políticos, con la anuencia de la mayoría de la sociedad ha ido desintegrando. Ya está claro que eso del honor pasó a la historia, mi comodidad, mi estabilidad, mi futuro profesional y personal están por encima de cualquier cosa. Patria; ahora país; pasó a ser sinónimo de Empresa, y me tiene que dar beneficios…tantos muertos: guardias civiles, policías, militares, civiles, que dejaron su vida por algo que entonces se podía llamar España, en el caso de “los funcionarios” (policías, guardias civiles, militares) por fidelidad al juramento que en su día hicieron besando la bandera, ¿para qué?

¿Ya hemos olvidado nuestro juramento y/o promesa?,¿incluso los militares? Muchos de ellos, esperan al retiro para abrir la boca. No es ese el modelo que yo aprendí de mi padre (coronel de infantería DEM) ya fallecido y gran parte de sus compañeros, y por tanto como buen alumno asumí. España está por encima de todo: familia, trabajo…porque España incluye eso y mucho más.

Hablan de “zona de confort”, cuando es cobardía. El juramento a la Patria mediante nuestra palabra y el beso de la enseña, es permanente, eterno, y aunque han ido cambiando hábilmente la fórmula: mi juramento es de 1983 (unidad de España; Ley 79/1980, de 24 de diciembre, sobre la fórmula para jurar la Bandera de España. (vigente hasta el 99)), la Ley 17/1999 de Régimen de Personal de las Fuerzas Armadas “borra unidad” e incluye “guardar y hacer guardar la Constitución”, poquito después “suprimimos a Dios” en La Ley de Carrera Militar (39/2007), pero; y me incluyo como indico “supra”, como soldado y exoficial RV; continúa recogiendo: “guardar y hacer guardar la Constitución”, cuyo artículo 2º indica: “La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas”.

También parece que aquellos que juramos, antes y ahora, monárquicos y no monárquicos, pero coherentes que el Rey; a quien estos políticos maltratan y vilipendian, de palabra, obra y omisión, es (vuelvo a la Constitución: art.56, art.61, art.62.aptdo h) Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, como nosotros prestó juramento de, guardar y hacer guardar la Constitución, ostenta el mando supremo de las Fuerzas Armadas, (es nuestro superior). ¿Cumplimos con nuestra obligación en relación con nuestra jefatura? Cierto es que se cargaron las Reales ordenanzas; estos tipos, de uno y otro color, no dan puntada sin hilo; y apareció la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la carrera militar. (artículo 2º de dicha ley: “El Rey tiene el empleo militar de capitán general del Ejército de Tierra, de la Armada y del Ejército del Aire, máximo rango militar que le corresponde en exclusiva como mando supremo de las Fuerzas Armadas”. ¡¡¡Importantísimo el art. 7º: “…obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si preciso fuera…”!!! ¿Por qué? En 2008, viene otra “puntadita” contra nuestro Rey, en disposición final décima, y pasamos de obedecer y respetar y no abandonar nunca, al “…, con lealtad al Rey…”. La RAE, nos hace un pequeño viaje que termina en FIEL: “Que guarda fe, o es constante en sus afectos, en el cumplimiento de sus obligaciones y no defrauda la confianza depositada en él.2. adj. Exacto, conforme a la verdad”. ¿Dónde quedó el art. 2 de la Constitución para los militares? Desde los soldados, quienes muchos llaman al Ejército, “la empresa”, hasta los mas altos oficiales, que como digo hablan al retiro. ¿Dónde quedó la lealtad, fidelidad a nuestro jefe cuando observamos impertérritos, pero sin mover siquiera un cabello, los feos, los desmanes, malas educaciones, faltas de respeto…por parte de políticos, periodistas…? Ese no es mi concepto de lealtad, desde luego. De este juramento los que creamos deberemos responder también ante Dios. Lo lamento mucho, porque soy consciente de que heriré a quien lo sea, pero hay poco militar vocacional, cuya única pretensión es hacer carrera y olvida que por encima de esto esta el juramento que prestó, a su Patria y a su superior S.M el Rey. ¡¡ Y si hay que perder la carrera por defender a España o al Rey, se hace!!, sobre todo cuando todos somos conscientes que él, tiene las manos atadas, ¿Qué somos? ¡Cobardes! ¡infieles!, ¡trepas!... Y por ahí andan los terroristas de Bildu, los golpistas de Puigdemont, los sin clase ni estilo, ni educación de podemos y sumar, el maleducado de Sánchez por no decir cosa peor, pero más justa sin duda. No se trata de “ruido de sables”, pero se debe dejar claro que no se tolerará bajo ningún concepto la rotura de España, ni la más mínima afrenta al jefe de las fuerzas armadas.

No publicarán este articulo por largo o políticamente incorrecto, pero haré todo lo posible porque así sea. Yo arruiné mi vida por ser fiel a ese juramento, y siendo civil, puse en riesgo mi vida y humillaron mi nombre y honor, por servir a España y al Rey en Siria, embutido en un grupo rebelde. Lo volvería a hacer, porque tengo claros mis principios y valores y el valor de una promesa y juramento, así como mi lealtad a mi superior, S.M el Rey, aunque no soy especialmente monárquico, pero sí coherente.

¡A ver si nos movemos! Viva España y viva el Rey.