La incidencia acumulada a 14 días es, ahora en Ceuta, de 58 casos por cada 100.000 habitantes. Es la cuarta cifra más baja de toda España por comunidades y hay una “muy sensible” diferencia respecto de la media nacional. A siete días se puede estar en breve en situación de “normalidad”. Una situación que cambia, y a peor, con
la presión hospitalaria ya que sigue siendo “extrema” en ocupación de UCI. Los indicadores están, en este caso, alejados de las medias nacionales por lo que sigue siendo “muy preocupante”.
El presidente de la Ciudad, Juan Vivas, ha pedido “prudencia” y “responsabilidad” a la población en el transcurso de una comparecencia oficial en donde ha dejado claro que hacer todo lo contrario no significa más que “llanto, dolor, muerte y ruina”, ha zanjado. “Quienes piensen que como está bajando la incidencia acumulada, como ha decaído el estado de alarma, esto se ha acabado, que estamos salvados o podemos bajar la guardia… se equivoca gravemente. Las consecuencias de pensar eso y no actuar de manera consecuente sería nefasto. El virus sigue matando, la UCI está en riesgo extremo. Si algo hemos aprendido de la experiencia es que ahora bajamos pero también la curva ha subido de manera pronunciada en otros momentos. No podemos bajar la guardia, la respuesta debe venir dada por la responsabilidad individual, cívica y ciudadana para seguir cumpliendo con las medidas preventivas que conocemos. Y por otra parte, cumplir de manera responsable las indicaciones y recomendaciones que dictan las autoridades sanitarias. Y también hay que vacunar, a cuantas más personas mejor y cuanto antes mejor”, ha zanjado Vivas. Y es que el gran reto de la institución municipal
es tener vacunada a toda la población que debe recibir dicha vacuna antes del verano. Entre personas que han recibido una dosis o las dos ya está el 30% de la población vacunada. Y entre la franja de 60 años en adelante, lo ha ha recibido el 75%, siendo este uno de los periodos que más muertes ha ido sufriendo en esta pandemia. Esta semana se abre ‘La Libertad’ como punto de vacunación y se podrá llevar un ritmo de administración de 1.500 vacunas diarias. A final de verano, toda la población objetivo de Ceuta estaría vacunada, es decir unas 66.000 personas. “La peor vacuna es la que no se pone. Hay que vacunarse”, ha insistido Vivas, sosteniendo esta afirmación en criterios de “seguridad y solvencia científica”. Vivas ha valorado además que en las residencias de mayores no se ha producido ningún fallecimiento, agradeciendo la labor de muchas personas de las diferentes áreas que han trabajado y se han dejado la piel para que todo funcionara como debía. “Sin ellos hubiera sido imposible”.