La
Asociación Española de la Guardia Civil (AEGC) considera intolerable lo ocurrido esta madrugada en plena
frontera del Tarajal, tras la
entrada de un kamikaze en Ceuta con medio centenar de subsaharianos dentro de una furgoneta. Y así lo considera porque, denuncia la asociación, se sigue poniendo en riesgo la vida de los agentes de la
Benemérita que prestan servicio al no haber medios suficientes de protección mientras se vende la existencia de una frontera inteligente. La asociación no tiene dudas: pide el cese inmediato de la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, por todo lo que está sucediendo y la hilera de acontecimientos ocurridos en el espacio fronterizo que no han hecho más que poner en riesgo a los agentes del Instituto Armado. "La falta de compromiso de la Delegada del Gobierno con la seguridad de los ciudadanos de Ceuta, de los policías y guardias civiles con los asaltos a la Aduana del Tarajal es indignante", añaden. AEGC recuerda que ya el 15 de agosto, en declaraciones a El Faro de Ceuta, denunciaron la falta de medios en la aduana del Tarajal para proteger a los guardias civiles que realizan servicio, al objeto de evitar así el paso de los conductores kamikazes “que se llenan los bolsillos sin importarles la vida de los inmigrantes y guardias civiles”, critica. Por aquel entonces aludían a la entrada de un conductor que, machete en mano, se saltó todos los controles siendo interceptado en la carretera nueva. "Ese día avisamos del peligro que corríamos todos y ese día llegó el anuncio que nunca se ha puesto en marcha. Por eso a AEGC nos resulta vergonzoso e insultante que la Delegación del Gobierno utilice nuestra seguridad, la de los ciudadanos e inmigrantes para hacer promesas políticas que no está dispuesta a cumplir", añaden desde esta asociación. “Nos resulta vergonzoso e insultante que la
Delegación del Gobierno anuncie a bombo y platillo una frontera inteligente y no sean capaces de hacer un sistema perimetral de seguridad en condiciones que evite los asaltos a la frontera y proteja la vida de los inmigrantes, ciudadanos y de los agentes que realizan servicio en este punto”, concreta a este periódico la asociación. La AEGC explica que lo ocurrido este lunes "se pudo evitar" y que "es imposible que no pasase porque todo se quedó en papel mojado porque la delegada del gobierno no ha hecho nada para evitarlo". “No sólo denunciamos los hechos, además AEGC puso sobre la mesa lo que se debía hacer, que no era otra cosa que colocar bolardos para evitar los asaltos y proteger la vida de inmigrantes. Reclamábamos medidas de seguridad para reforzar los accesos y un perímetro de seguridad en un lugar tan sensible y en alerta 4 nivel antiterrorista. El coste de esta medida no era y no es excesivo, el de una vida perdida no tiene precio”, recuerda. Pues bien, tres meses después no ha habido novedades y se ha vuelto a producir un suceso que pudo haber terminado en tragedia. “Muchos meses después de llenarse la boca manifestando una nueva frontera inteligente y el anuncio de miles de millones en reforma del perímetro fronterizo, vuelve hacer caja un conductor kamikaze poniendo en riesgo la vida de los inmigrantes, ciudadanos, policías y guardias civiles que estaban en dicha frontera esta madrugada”. “La delegada del Gobierno de Ceuta ha dejado patente la falta de respeto por la seguridad de los viajeros, inmigrantes, policías y guardias civiles. Una falta de respeto intolerable porque no se ha acometido ninguna media para acabar con estas situaciones de riesgo y eliminar con un gasto mínimo el asalto continuo a la aduana del Tarajal”.