La gente gritando espera que salga el líder de
Vox, Santiago Abascal, del
hotel La Muralla. Hasta ese momento se habían escuchado insultos por ambas partes, se habían exhibido pancartas con distintos mensajes, pero no se habían producido incidentes. Es entonces cuando alguien apunta que Abascal va a salir por el lateral del parador y es entonces cuando el personal concentrado acude a ese punto, al lado de la Comandancia General de Ceuta, para intentar increpar de cerca al número 1 de Vox, provocando así que la
Policía forme un cordón de seguridad. Gritos, lanzamiento de huevos, más gritos, empujones… y, sorpresa, alguien lanza una silla de playa. ¿Quién se lleva una silla de playa a una concentración? Más de uno se lo pregunta.
Desde una esquina del lugar se aprecia en vídeos grabados, como asoma con furia la famosa silla que derivó en la que fue la primera carga policial.
Esa silla partió, sin poder aclararse todavía bien su origen, desde uno de los lados alejado de la multitud, sin que consiga todavía verificarse si partió desde dentro de una esquina o desde fuera. Poco después llegaría la agresión con un objeto al jefe superior de Policía, que recibió el impacto en una de las piernas. Es aquí donde comienzan las cargas policiales.
Procedimiento judicial abierto
Las fuerzas de seguridad están investigando ya lo ocurrido, identificando a los agresores y a los que estuvieron relacionados con delitos de daños, agresiones, atentados o altercados varios. En esas labores se está trabajando, cuando el proceso ya está judicializado y dos personas –ambas indocumentadas- han sido presentadas en el juzgado de guardia tras pasar la noche detenidos en los calabozos. En el marco de ese descontrol se produjeron destrozos en el mobiliario urbano, plantas y árboles además de todo tipo de elementos que había en el camino. Ahora se trabaja en identificar a los implicados en los mismos ya que son responsables de sus actos.