Gastos y más gastos: que si la luz, que si el agua, que si la comida, que si el alquiler, que si la hipoteca, que si, que si, que si...
El común de los mortales espera la nómina en tiempo y forma a final del mes vencido. Ya no hay cuestas de enero, hay cuestas todos los meses del año, y más en Ceuta, que los alquileres van que chutan y vivir en la ciudad implica tener un buen bolsillo.
Pues eso, todos esperamos como agua de mayo esa nómina, ese jornal, ese salario que disipe los miedos durante los 30 eternos días. Los bancos no esperan, la hidroeléctrica no atiende a razones, las compañías telefónicas te amenazan con intereses por impagos y te cortan la línea en menos de lo que canta un gallo.
Yo, que ya soy perro viejo, he visto situaciones dramáticas a la hora de esperar el parné mensual. Ya te pagaré, no está bien la cosa, no te quejes porque hay mil en la cola y todo lo que uno se pueda imaginar
Yo curré en una confitería con unos primos; eran los dueños y tardaban una eternidad en pagarme. Siempre había un pito o una flauta. De ahí el dicho: “Cuanto más primo, más me arrimo”.
Ya uno no sabe dónde ir cuando esto pasa. Quedan los amigos, la pareja, los compañeros solidarios o ponerse a pedir en la Iglesia de Los Remedios.
No sucede solo en la empresa privada, también los funcionarios pueden ser víctimas de estos dislates administrativos.
La Dirección Provincial de Educación de Ceuta se ha olvidado de algunos compañeros y no les ha ingresado los emolumentos correspondientes. Comenzaron a trabajar a mediados de septiembre y ya estamos en el día de todos los santos. ¿Qué ha pasado? ¿Pueden pedir un préstamo sin intereses? ¿Han tenido el detalle de llamarlos y explicarles lo que ha sucedido?
Toca pedir cita para hablar con nóminas, toca que te den la cita, toca poner una reclamación, toca que sea imposible contactar con el departamento correspondiente y también toca tirarse de los pelos cuando la economía se lee en números negativos.
Me dicen que la administración tiene seis meses de plazo para pagar a sus currantes. ¿Y mientras tanto? ¿Nos comemos los mocos o vamos a la cola de la Cruz Roja?
¿Qué sucede? Un fallo, una tecla que no se ha pulsado, la culpa es de Madrid, Hacienda tiene que firmar. Todo es posible. Las excusas son como los culos, que cada uno tiene el suyo
Y digo yo, ¿no se puede subsanar el entuerto sin que pase otro mes de espera?, ¿no hay manera de arreglarlo al día siguiente? La respuesta es no o como se dice en mi tierra, apáñatelas como puedas.
Comete un error a la hora de pedir destino, llega cinco minutos tarde a la presentación de una oposición, equivócate en cualquier cosa y verás lo que vale un peine.
La gracia es que muchos de los afectados callan como mudos pues piensan que cobrarán tres nóminas juntas y aquí paz y después gloria. Encima estarán agradecidos pues hay gente peor.
No sé si se pudiera luchar sin tener que rezar, pero no está el horno para bollos.
A los afectados les queda esperar el milagro del pan y los peces para darles de comer a su prole.
Ya no digo más, a ver si el Cañonazo no tiene dinamita que echarse a la boca el próximo mes pues la pólvora puede esperar.
Por cierto, a los compañeros que han consolidado la plaza con destino en Cantabria les han comunicado que la antigüedad la cobrarán a final de curso... y como se quejen a ver lo que pasa.
“Asalariados del mundo, uníos”.
Tal como está la cosa debería estar contento con tener un trabajo, según el reciente estudio del INE esta ciudad es de las más pobres de España, muchos se dejarían cortar un dedo por tener un trabajo como el suyo, disfrute de lo votado y no llore tanto.