Bomberos sofocó ayer el incendio provocado en un vehículo, modelo Honda Civic, que estaba estacionado a las puertas de un garaje en la barriada La Reina. El incendio se produjo en torno a las cuatro de la tarde, y, según las valoraciones de los propios vecinos, quien provocó la quema levantó el freno a mano del coche lo que provocó que cayera, en llamas, por una pendiente. Finalmente el vehículo paró su marcha al ser frenado por un bordillo y una pared.
Fue un vecino quien, al detectar el humo, llamó al 112, desviándose la llamada para movilizar a una dotación del SEIS que gastó 1.500 litros de agua. El coche era propiedad de un joven que reside en uno de los bloques del edificio La Reina. Los vecinos de la barriada mostraron su malestar por lo ocurrido, al haberse producido el incendio sin temor alguna a la presencia de fuerzas de seguridad, ya que era primera hora de la tarde. “Quien hace esto parece que no teme a nadie. Ya los queman cuando lo puede ver la gente”, apuntaba un vecino tras los hechos.
Aunque su apreciación parece lógica, en el lugar nadie aportó datos sobre la posible autoría de lo ocurrido. Sí que insistieron en el riesgo provocado, ya que al caer por una pendiente el vehículo en llamas podía haberse topado con otro coche en circulación o con algún menor de los que acostumbran a jugar en la calle.