Dentro del Plan de Barriadas 2015-2019 se encuadraba la remodelación de la pista deportiva de Juan XXIII. En dos meses y medio entraremos en 2022 y todavía no hay respuesta alguna sobre la paralización de las obras. En primera instancia, la Ciudad comunicó que se iban a detener las actuaciones durante unos meses porque “la Federación contactó con la Consejería de Deportes solicitando que el campo se hiciera con más gradas de las que inicialmente tenía para integrarlo dentro de los campos de competiciones”.
Ese motivo llevó al Ejecutivo local a tener que adaptar el proyecto inicial y hacer un modificado con ajustes para que no se elevara sus coste. Cabe recordar que este proyecto fue adjudicado a Tragsa hace dos años, entonces cifrado en 3,1 millones de euros.
Pero esta situación se está alargando en el tiempo y los vecinos no obtienen respuesta alguna. Hubo promesas de que retomarían las obras y las hubo en varias ocasiones, pero las ejecuciones siguen paralizadas, no hay maquinaria alguna y los obreros no son vistos por la zona. Una situación similar a lo que está ocurriendo en el puente de Arroyo Paneque, por eso los vecinos de Juan XXIII quieren insistir para no verse en la misma tesitura.
Ahora lo único que se puede apreciar a simple vista es parte de la pista deportiva que había anteriormente que no fue retirada en su totalidad. En lo que sería, más o menos, el centro del campo hay un gran boquete que se llevó a cabo en los primeros días de obras pero que ahora se ha quedado con esa estampa. Lo único que se puede apreciar para que parezcan unas obras ‘reales’ es un cartel desgastado donde se anunciaba qué es lo que se iba a realizar. Todo el recinto se encuentra vallado.
Por último una de las cosas que más lamentan los vecinos es el local social. Se les informó que tras la petición de la Federación de Fútbol se le buscaría otra ubicación, pero por el momento desconocen el lugar.
Lo único que saben es que el que tenían se lo quitaron y ahora no tienen ninguna zona donde reunirse. Es más, señalan que ahí ensayaba uno de los coros navideños con más solera y que desde entonces no tienen ningún recinto habilitado en toda la barriada.