La creación de una zona económica especial en Ceuta y Melilla, igual que existe en las Islas Canarias, es una de las propuestas que lanza el informe sobre redefinición de la economía del sur y oportunidades y desafíos de futuro de ambas ciudades, presentado por el Instituto de Seguridad y Cultura.
El profesor experto en análisis económico Diego Sánchez, autor del informe, ha explicado en Málaga que hay 400 zonas de este tipo en Europa y que esa figura permitiría acceder a ventajas fiscales, regulatorias y de trato institucional que se materializaría en inversiones en unas ciudades que ya gozan de regímenes especiales.
La actividad económica o Producto Interior Bruto (PIB) podría crecer de forma estructural y continuada, al igual que los niveles de ocupación, y supondría una inyección económica de 100 millones de euros y la creación de 1.000 puestos de trabajo permanentes en estas ciudades autónomas, además del impacto indirecto.
Este octavo informe del Observatorio de Ceuta y Melilla, dependiente del Instituto de Seguridad y Cultura -entidad privada con sede en Madrid-, plantea una redefinición "mirando más al norte" en la actual coyuntura de cierre de las aduanas comerciales en las fronteras terrestres de ambas ciudades por Marruecos.
Se apuesta por trabajar en las infraestructuras de transportes de mercancías y pasajeros, estrechar la vinculación con Andalucía, mejorar la oferta de conectividad y desarrollar atractivos económicos y sectores de raíz tecnológica.
Se propone mirar a Málaga como capital económica del sur de España en el actual contexto de desglobalización y de bloques de economías afines y en línea con conceptos como la globalización selectiva.
Ceuta y Melilla comparten altas tasas de desempleo, por encima de la media nacional, y en estas ciudades el valor añadido bruto que supone la administración pública ronda el 50 por ciento, mientras que en el cómputo nacional es del 19 por ciento, lo que le hace que sea determinante en esas economías locales.
Sin embargo, reclaman que esa presencia sea más eficaz y plantean intensificar lazos económicos y políticos con Andalucía en aspectos como en los puertos y los cruceros y atraer un turismo de calidad con una oferta de ocio y cultural y proyectos para lo que ponen como ejemplo a la ciudad de Málaga, con la que proponen que Ceuta y Melilla colaboren por una complementariedad económica.
Sánchez ha destacado el auge tecnológico de Ceuta y Melilla, con más de 30 empresas que se trasladaron a estas ciudades a raíz del brexit y que han creado 500 empleos que podrían duplicarse.
La creación de esta zona económica especial debe reclamarse inicialmente al Gobierno central y el director de este observatorio, Carlos Echeverría, invita a la reflexión y a la toma de decisiones ante este informe y cree que el Estado debe volcarse más con Ceuta y Melilla.
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