Las familias podrán adquirir el material que no se pueda reutilizar en cualquier librería adherida al plan
El nuevo Programa de Gratuidad de Libros de Texto de la Consejería de Educación, cuyas bases ya han sido aprobadas por el Consejo de Gobierno y todavía no han sido publicadas en el BOCCE, está concebido para “extender el ámbito de la adquisición y reposición de libros para procurar la gratuidad universal de forma progresiva en los niveles de Educación básica obligatoria y en el segundo ciclo de Educación Infantil (3 a 5 años)” y se estructurará en torno a tres sistemas.
Por un lado, se hará uso de los textos existentes en el Banco de Libros actual que mantengan su vigencia de acuerdo con las decisiones pedagógicas de los órganos de coordinación didáctica de los centros y respetando la normativa que establece el currículo de Educación Primaria, Secundaria y Bachillerato para el ámbito de gestión del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD).
En los casos en que los libros de texto depositados en el Banco de Libros “no sean suficientes para cubrir las necesidades de todo su alumnado”, los centros procederán a la adquisición de los restantes, previa transferencia de la Ciudad Autónoma, con el objetivo de que a través de un sistema de préstamo los estudiantes usen los textos durante el curso, devolviéndolos después para su utilización por otros alumnos en los cursos siguientes.
Por último, se entregarán ‘cheques-libro’ a las familias “con la finalidad de que éstas lo canjeen en la librería de su elección de entre aquellas adheridas al Programa por los libros correspondientes en los casos en los que no proceda su devolución al Banco de Libros por tratarse de material consumible por el uso en un solo curso”.
El proceso de implantación del Programa de Gratuidad de Libros será paulatino y se realizará al amparo del Convenio de Colaboración entre el MECD y la Ciudad para el desarrollo de programas de interés mutuo centrados en acciones de compensación educativa y de formación de personas jóvenes y adultas desfavorecidas.
El Programa se iniciará en el curso 2018-2019 aumentando la cobertura del sistema de reposición de libros existente hasta ahora
El calendario se iniciará en el curso 2018-2019 aumentando la cobertura del sistema de reposición de libros existente hasta ahora, de forma que en cursos escolares sucesivos “se tenderá a incrementar la gratuidad universal”. Dada la implantación progresiva del Programa, que sustituirá al sistema de beneficiarios de la Reposición de Libros de Texto según requisitos económicos, cada convocatoria “determinará la extensión de la gratuidad”.
Los centros educativos públicos y privados concertados que deseen acogerse al Programa como centros colaboradores deberán firmar un documento de adhesión al mismo que implicará la aceptación de las bases reguladoras.
Serán beneficiarios del Programa todos los alumnos matriculados en los centros públicos y privados concertados de Ceuta en el segundo ciclo de Educación Infantil y en las etapas de Primaria y Secundaria “salvo que expresamente renuncien a su participación”.
El acto de la renuncia, que se tendrá que formalizar en el centro educativo, solo será válido para el curso en el que se realice, por lo que “no conllevará ningún otro tipo de consecuencia para cursos posteriores”.
Las familias y estudiantes deberán hacerse responsables
El alumnado que participe en el Programa de Gratuidad, así como sus padres o representantes legales, tendrán varias obligaciones. Los beneficiarios del ‘cheque-libro’ deberán entregarlo en la librería de su elección debidamente cumplimentado y firmado, autorizando su entrega al personal del Convenio MECD-Ciudad a efectos de control, seguimiento y reparto al inicio del curso escolar, así como el pago por parte de la Ciudad previa presentación de la correspondiente factura.
Los beneficiarios del Banco de Libros quedarán obligados firmar la recepción en préstamo de los de texto correspondientes al curso escolar “asumiendo el compromiso de su devolución en la fecha marcada por la Consejería en cada convocatoria”.
Igualmente se exigirá el compromiso de someterse a las actuaciones de comprobación a efectuar por la Consejería de Educación o por el centro docente donde curse sus estudios y a las de control financiero que correspondan de acuerdo con la legislación .
Será obligatorio “hacer un uso adecuado y cuidadoso de los libros y, en los casos de préstamo, reintegrar los mismos al centro docente donde ha estado escolarizado al finalizar el curso escolar o en el momento de su baja del centro si se produce su traslado”, así como “reponer el material extraviado o deteriorado de forma culpable o malintencionada”.
Apoyo de la Ciudad para los centros con materiales curriculares propios o ajenos
En Infantil, los alumnos que utilicen libros de texto recibirán un ‘cheque-libro’ de 95 euros que cubrirá el valor del método globalizado. Aquellos centros que en esta etapa no utilicen libros y opten por materiales curriculares de elaboración propia recibirán una subvención por alumno con una cuantía igual.
En los dos primeros cursos de Primaria, los alumnos de los centros que utilicen libros de texto recibirán un ‘cheque-libro’ por importe de 130 euros, que, si no alcanzase para cubrir los libros de texto y materiales didácticos necesarios para todas las áreas curriculares, priorizará “las áreas del bloque de asignaturas troncales”.
De 3º a 6º curso de Educación Primaria, los centros recibirán una cuantía destinada a que todo su alumnado matriculado cuente con los libros de texto necesarios en cada curso, teniendo en cuenta las existencias del Banco de Libros, realizando las adquisiciones precisas para garantizar “como mínimo” los de Ciencias de la Naturaleza, Ciencias Sociales, Lengua Castellana, Matemáticas y Primera Lengua Extranjera (Inglés).
En Secundaria los centros recibirán una cuantía “suficiente” para que los alumnos cuenten, al menos, con los libros de Ciencias de la Naturaleza, Ciencias Sociales, Lengua Castellana y Literatura, Matemáticas y Primera Lengua Extranjera (Inglés).
En la primera convocatoria serán beneficiarios “exclusivamente los alumnos que lo resultaron en el año anterior a través del Programa de Reposición de Libros, tendiendo a la universalidad de forma paulatina en las sucesivas convocatorias”, según el protocolo establecido.