Profetas fuera de su tierra

A veces salta una noticia en los periódicos que, por su poca extensión, da la impresión de que es una noticia de las consideradas “menores”. Y, sin embargo, contiene mucha más enjundia de lo que aparenta.
La semana pasada salió publicada en este diario un titular del siguiente tenor: “La Plataforma Motera de Ceuta fomenta la seguridad vial con la Policía de Los Barrios”.
Teniendo en cuenta que noticia no es que “un perro muerda a una persona”, sino que “una persona muerda a un perro”, lo llamativo no es que la Plataforma Motera de Ceuta colabore en una campaña infantil de educación vial, que seguro que están encantados, sino que ésta se desarrolle en la bellísima localidad gaditana de Los Barrios en lugar de en Ceuta.
Los escolares barreños han tenido la suerte de que al político de turno de su localidad le haya parecido conveniente firmar un convenio de colaboración con la Plataforma Motera de Ceuta. Mediante este convenio se articula una campaña en la que están implicados la Policía Local, los padres de los alumnos, los profesores, y la Plataforma Motera (ojo al dato, como diría aquél)….. ¡¡¡de Ceuta!!!.
Suelo seguir con atención las colaboraciones semanales de este colectivo de moteros en “El Faro” (ellos también, como diría D. José María Campos, predican en el desierto), y sus opiniones y propuestas son siempre muy aprovechables y lamentablemente poco aprovechadas. No tengo la más mínima duda de que  también pertenecen al amplio colectivo de los que quieren lo mejor para su ciudad (que no es Los Barrios, sino Ceuta). Y que, antes de proponer su feliz iniciativa en la otra orilla, la han propuesto en ésta. ¿Habrán recibido una negativa, o simplemente el silencio por respuesta?. Es lo mismo. El resultado es que, como tantos otros, hartos de políticos incompetentes y de burócratas, se ponen el casco, arrancan sus motos, y se marchan con la música a otra parte.
Algunos dirán que no es para tanto. Pues miren ustedes…. sí lo es. Y no ya (que también) por la importancia que pueda tener que nuestros escolares reciban cuanta más educación vial mejor, sino porque es un síntoma de que “algo no funciona en nuestra Casa Grande”. ¿Cuántas buenas ideas se han quedado arrinconadas porque dependían del criterio de alguien que no supo ver más allá de su nariz y luego van a resultar muy positivas, como se ha encargado de demostrar la corporación municipal de Los Barrios?. Por cierto: ni sé ni me importa qué partido político gobierna en Los Barrios. El tema no es “partidista”. Los temas que atañen a nuestros niños deben quedar fuera del juego político.
Es necesario que nuestros gobernantes asuman que su deber es apoyar propuestas e iniciativas que redunden en beneficio de sus administrados, sin mirar su color político o de qué colectivo o persona vengan (entre otras cosas, para eso les elegimos) y eso no ocurre ahora.
Señores políticos. En ROMÁN PALADINO, para que lo entiendan: “Lo importante no es si es gato blanco o gato negro. Lo importante es que cace ratones”.