La “calidad” de los proyectos será el criterio al que Procesa otorgará más peso en la baremación de las propuestas que reciba para optar al reparto de los 125.000 euros que el Consejo de Gobierno acordó anteayer en una reunión extraordinaria dedicar a una línea de ayudas para contribuir a la “reactivación económica” de dos sectores claves en la ciudad, el comercio y la hostelería.
Según han informado fuentes de la Sociedad de Desarrollo de Ceuta, para evaluar ese parámetro se tendrá en cuenta que las ideas subvencionables vengan avaladas por estudios de mercado, sean “concretas” y “detalladas”, tengan el mayor alcance posible, propicien el mayor incremento posible de las ventas de los beneficiarios y dispongan de recursos humanos “idóneos” para su implementación.
De forma complementaria, la administración local también valorará la “capacidad técnica y de gestión” de los solicitantes y que incluyan el uso de nuevas tecnologías “como aplicaciones informáticas específicas, redes sociales, códigos QR...”.
La convocatoria se dirigirá a organizaciones “interprofesionales” y corporaciones de derecho público que representen a al menos 150 establecimientos activos en calidad de asociados y que estén operativas desde hace más de cinco años.
Los proyectos que se planteen deberán incluir actuaciones dirigidas a “fomentar el consumo y propiciar el incremento de las ventas” en el comercio minorista y la hostelería “como medida prioritaria al objeto de contribuir a mejorar su competitividad y productividad, así como al mantenimiento y generación de empleo”.
Las únicas actividades excluidas del ámbito comercial son los puntos de venta de tabaco y las gasolineras. Con respecto a la hostelería, las iniciativas habrán de incluir actuaciones dirigidas a restaurantes, cafeterías, bares y similares (heladerías...). Adicionalmente, dentro del sector servicios también se contempla sufragar proyectos centrados en los establecimientos de peluquería y otros tratamientos de belleza.
Procesa considera que los sectores diana han sido los más perjudicados por la crisis sanitaria, que en Ceuta ha ido acompañada también del cierre de la frontera, lo que ha multiplicado el perjuicio generado.
“Ambos tienen una gran importancia desde el punto de vista urbano, social y económico, al mismo tiempo que contribuyen de forma determinante a la consolidación de un tejido productivo sólido y con capacidad para crear empleo de calidad en la ciudad, contribuyendo de forma positiva al bienestar vecinal, y constituyendo, asimismo, ejes del desarrollo local y del dinamismo urbano”, considera la empresa pública.
Los proponentes deberán explicitar la situación de partida que se pretende abordar, así como cuantificar el coste de las medidas ideadas y detallar los resultados esperados en términos de “participación ciudadana y empresarial”, así como de incremento de las ventas y de sostenimiento (o generación) de puestos de trabajo.
La sociedad pública encargada de la gestión del programa solamente aceptará sufragar aquellas actuaciones que “indudablemente” vayan orientadas hacia los propósitos marcados y se realicen en el plazo que se estipule en la convocatoria que se publicará en el BOCCE de inmediato.
La actuación aprobada por el Consejo de Gobierno anteayer a propuesta de la consejera de Hacienda, Kissy Chandiramani, persigue también el objetivo de “contribuir a mejorar y garantizar la distribución de bienes y servicios, intentando mantener la oferta existente y que esta no se vea reducida, lo que al mismo tiempo se considera beneficioso para los consumidores pues garantiza el abastecimiento a la ciudadanía, mediante una oferta integral, competitiva y adaptada a sus necesidades”. De hecho, Procesa prevé excluir expresamente de la condición de beneficiarios de las medidas a subvencionar a los establecimientos que carezcan de una sede física en la ciudad autónoma.
Procesa prevé dedicar en 2022 un total de 15,9 millones del Fondo REACT-EU de la Unión Europea a la puesta en marcha de nuevas líneas de ayudas (y a sufragar las ya activadas como el proyecto ‘Ceuta Resiste Más’) que “contribuyan a reducir el impacto económico de la pandemia” y “fomenten la implantación de proyectos estratégicos que dinamicen la actividad económica con nuevas estrategias empresariales e impulsen la transición digital con la ampliación de los servicios de administración electrónica para facilitar unos servicios públicos de calidad minimizando costes y riesgos para trabajadores públicos y administrados”.
Al margen de las ayudas para dar liquidez a las empresas locales, se prevé una convocatoria de subvenciones “atractivas” que sirvan para “incentivar la implantación de iniciativas estratégicas que, o bien permitan la reconversión de proyectos empresariales locales, o bien supongan un estímulo para la atracción de inversores foráneos que puedan reubicar parte del empleo afectado”.
El objetivo de esta medida es “fomentar la implantación de empresas vinculadas a sectores con amplio valor añadido en el ámbito de las tecnologías digitales, la economía verde y circular o industrias ligeras de transformación intensiva en mano de obra”.
En el ámbito de la administración se pretende “actualizar infraestructuras tecnológicas del sector público” y también “impulsar la aplicación de servicios de automatización y servicios de gestión inteligentes, simplificando los procesos que redunden en un mayor bienestar para la ciudadanía y en una mayor eficiencia empresarial”.
Nuevas tecnologías. En la valoración de los proyectos que se reciban se tendrá en cuenta, además de su “calidad” medida a través de distintos parámetros concretos, el grado en el que incorporen el uso de nuevas tecnologías, es decir, aplicaciones informáticas específicas, códigos QR, las redes sociales, etcétera.
Diagnóstico y previsiones. Los proponentes deberán efectuar en sus propuestas un diagnóstico detallado de la situación de partida que se pretende corregir, pero también las medidas a subvencionar “de forma concreta y detallada”, los resultados que esperan alcanzar a través de su implementación, su coste y los resultados previstos en términos de “participación ciudadana y empresarial, incremento de las ventas, sostenimiento o generación de puestos de trabajo, inversiones inducidas o aprovechamiento de economías de escala”.
Destino y plazo. La convocatoria que se publicará de inmediato en el BOCCE detallará los plazos en los que deberán realizarse las actuaciones subvencionadas, que en cualquier caso deberá estimarse por parte de Procesa que “indudablemente” se dirigen a los fines estipulados y resultan “estrictamente necesarias” para su consecución efectiva.
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