El piloto de una moto de agua, que fue detenido por la
Guardia Civil este verano cuando pretendía introducir en la Península a un
inmigrante marroquí, ha sido condenado a una pena de 2 años de prisión por el tribunal de la Sección VI de la
Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta. La figura jurídica de la conformidad evitó la celebración de vista judicial, al aceptar el acusado esta condena que deberá cumplir en prisión ya que la Sala no aplicó la suspensión de la misma al existir antecedentes aunque estuvieran cancelados.
Los hechos a los que hace referencia este acuerdo, alcanzado esta semana en la Audiencia, se remontan al pasado 21 de agosto cuando el acusado fue sorprendido por los agentes de la Guardia Civil adscritos al Servicio Marítimo a dos millas y media de la costa. Tenía como destino la Península, pero la rápida intervención de los componentes del Instituto Armado abortó la trayectoria procediendo a la detención del pasador así como del marroquí que llevaba de ‘paquete’.
Aunque en un principio la calificación del Ministerio Fiscal contemplaba una petición de cárcel de 7 años, las negociaciones llevadas a cabo fructificaron en un acuerdo reducido a dos años entre rejas. Este suceso, que ha terminado con una condena judicial, se enmarca en una serie de hechos vinculados con la inmigración clandestina que se produjeron este verano y que tuvieron como protagonistas a muchos jóvenes de Ceuta implicados en pases de marroquíes a la Península. El día en que se produjo este arresto hubo otras detenciones más relacionadas con la introducción de sin papeles en motos de agua en Ceuta o con las travesías directas a la Península. De hecho este verano se han batido record de arrestos de pasadores y de inmigrantes marroquíes interceptados bien a bordo de motos de agua, como ha sido el caso, o bien en zodiac.