Un juzgado de instrucción de Utrera (Sevilla) ha ordenado el ingreso en prisión del conductor del camión que en la madrugada de este martes ha arrollado un control de la Guardia Civil en la autopista Sevilla-Cádiz ocasionando la muerte de seis personas, entre ellas dos guardias civiles, parece que uno de ellos es de Ceuta, pero no es así.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), al conductor se le atribuyen seis presuntos delitos de homicidio por imprudencia y tres delitos de lesiones graves por imprudencia.
Durante su comparecencia judicial, el conductor, que resultó ileso en el accidente y dio negativo en el control de alcohol y drogas, ha prestado declaración y ha asegurado que no vio el control de la Guardia Civil.
Ha sido el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Utrera, en funciones de guardia, el que ha ordenado, a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del conductor del camión.
Detenido después del atropello
El camionero, de 59 años de edad y que trabaja para una empresa de transportes de Lucena del Puerto (Huelva), fue detenido después de que atropellara mortalmente a seis personas en el control de la Guardia Civil en la autopista AP-4 a la altura de Los Palacios (Sevilla).
Además de los seis fallecidos, en el accidente han resultado heridos graves otros tres guardias civiles, que fueron trasladados a hospitales de Sevilla.
Los dos agentes fallecidos y sus tres compañeros heridos formaban parte de un despliegue de los Grupos de Acción Rápida (GAR) para combatir el narcotráfico en el sur y estaban realizando un control aleatorio en esa zona de la autopista, en un operativo habitual.
La Dirección General de Tráfico (DGT) apunta a la somnolencia del conductor del camión, que transportaba frutas y hortalizas, o a otra distracción como la causa principal del accidente.
A quien se le ocurre un control en una curva a las cuatro de la mañana con la niebla que hay en medio de la carretera como si lo fuera exo aposta el pobre camionero menuda desgracia
Sois más censuradores, que los del franquismo!