El
Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Ceuta, en funciones de guardia, ordenó ayer el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del
detenido por un presunto delito de tráfico de drogas en su modalidad de notoria importancia, tras habérsele encontrado en el camión que conducía 331 kilos de
hachís. Queda pendiente de juicio en el Juzgado de lo Penal correspondiente, tal y como confirmó ayer a El Faro de Ceuta el TSJA.
Detrás de esta intervención, llevada a cabo por la Compañía Fiscal, hay un auténtico plan preconcebido de pase que fue desbaratado por los agentes pero que responde a un trabajo muy estudiado para intentar burlar los controles. No se trata del típico servicio en el que se encuentra droga escondida en un doble fondo sin más, sino que la ocultación de los 331 kilos de hachís se había llevado a cabo de una manera compleja dentro del camión de reciclaje de vidrio usado.
Ahora, mientras el vecino de Almería A.V.G., de 50 años, permanece en prisión preventiva en la cárcel de Mendizábal, la
Guardia Civil investiga y trata de localizar a más implicados en la comisión del delito. En la mañana de ayer el Instituto Armado vino a confirmar la información adelantada por este periódico, concretando los detalles de una historia que demuestra por un lado la pericia de la Compañía Fiscal y Grupo Cinológico y, por otro, la maquinaria de las pequeñas redes de tráfico de estupefacientes para encontrar el factor sorpresa en su afán de introducir el hachís en el mercado europeo.
En esta ocasión, los agentes procedieron a controlar el camión usado para el transporte de vidrio reciclado después del “proceso de análisis de riesgo que se realiza para la elaboración y explotación de la información que se obtiene de la actividad que se realiza en el recinto aduanero de Ceuta”.
El detenido, de 50 años, estará en Mendizábal hasta el juicio oral
Lo curioso de este tipo de camiones es que disponen de una grúa incorporada “que permite vaciar por su parte superior los contenedores de dicho material, trasladándolos hasta la planta de tratamiento de vidrio, efectuando su vaciado elevando el contenedor y procediendo a la apertura de la puerta hidráulica posterior que provoca la caída de todo el contenido”, explica la Benemérita. Eso fue pensado para la descarga del vidrio pero también para favorecer la preparación de un doble fondo en el que esconder hachís y que no pudiera ser apreciado de manera fácil. Llegar al hueco elegido para practicarlo no era sencillo y por eso se eligió ese modus operandi para esconder grandes cantidades de hachís a la espera de su introducción en la Península.
Se hizo seguimiento al camión ante las sospechas de ocultación de drogas
El camión, modelo Renault-320, de matrícula nacional, fue parado en el control de embarque ante las sospechas de que estuviera sirviendo de tapadera para el tráfico de hachís. “Durante su reconocimiento en la parte superior se apreció únicamente el vidrio que había sido vertido, por lo que se le indicó al conductor que procediera a la apertura de la puerta hidráulica trasera, observándose que en la parte inferior a la ubicación del vidrio se había practicado un doble fondo donde, tras un exhaustivo reconocimiento y mezclado con otras bolsas conteniendo botellas, fueron hallados 331.400 gramos de resina de hachís”, explica la Comandancia.
El servicio comenzó pasadas las cinco de la tarde y no fue hasta bien avanzada la noche cuando se finalizó el reconocimiento íntegro, ante las sospechas de que pudiera haber más droga escondida. Lo que se puede demostrar es este alijo aprehendido, pero lo sofisticado del plan seguido para el embarque de esta cantidad hace sospechar otros usos anteriores para más pases. Los investigadores del Instituto Armado tienen ahora el cometido de avanzar después del hallazgo ejecutado por la Compañía Fiscal, intentando dar con la infraestructura que ha sostenido la comisión de este delito.
La droga fue trasladada al área de Sanidad de la Delegación del Gobierno para su análisis y posterior informe que deben trasladar al juzgado, mientras que el vehículo quedó inmovilizado.
Desde septiembre de 2019 la Benemérita no había interceptado un camión con hachís en el puerto de Ceuta. Esta además es la primera intervención de droga en el puerto tras la normalización de los enlaces marítimos.