Mi primer Congreso BPW. Cairo Octubre 17

Las mujeres de 73 países del mundo, que llegamos a ser 630 congresistas nos reunimos en Cairo, para hablar del cambio económico, social, laboral y político que están llevando a cabo mujeres del todo el mundo

En Noviembre de 2016, mientras navegaba por Internet, buscando una web que tratara el tema de las mujeres empresarias y emprendedoras, a nivel internacional, me encontré casi por casualidad al BPW, que son las siglas de Business Professional Women, entidad que se fundó en 1930 en Estados Unidos. Me sorprendió gratamente, averiguar más sobre esta organización. Sin embargo, esto era el inicio de una gran aventura. Así que en el mes de Junio de 2017, me inscribí junto con otra asesora de empresas Fatiha Lahasen, a asistir al que sería nuestro primer congreso de BPW, que se celebraba en Cairo a finales de Octubre. Personalmente, Egipto nunca había estado en mis lugares preferidos para viajar, pero creía firmemente en la oportunidad que se presentaba de asistir a este congreso, y sobre todo por lo inspirador del lema “ Making the difference by leadership and action”, “ Marcando la diferencia a través del liderazgo y de la acción”, y así es, las mujeres de 73 países del mundo, que llegamos a ser 630 congresistas nos reunimos en Cairo, para hablar del cambio económico, social, laboral y político que están llevando a cabo mujeres del todo el mundo. Es sorprendente, como países tan pequeños como Nepal asistían con una delegación de 25 mujeres, o Pakistán, Nigeria o Líbano con otras tantas. Mujeres llegadas desde Australia, hasta Mar de Plata, cada una con su historia de superación, de sacrificio, de emprendimiento, y sobre todo, de creer en la lucha por la igualdad.

La experiencia ha sido increíble y sobre todo fructífera, pues de dicho encuentro, y tras conocer a las mujeres que asistieron como Federación BPW España, se ha llegado al compromiso por mi compañera de aventuras y por mí, de crear el club BPW Ceuta, y formar parte de esta Federación.

Asimismo, hay que señalar que este primer congreso, nos ha demostrado que la lucha de las mujeres se libra en todos los países, que aún queda mucho por hacer, y que el cambio económico, social, político, se está llevando a cabo, quizás no sea tan visible como se desearía, pero ahí está. La discriminación salarial respecto al sexo, existe en casi todos los países, siendo Islandia el único país del mundo, donde son iguales los salarios para ambos sexos. En España, aún se sigue peleando por ello en los tribunales, tal y como ha ocurrido en Tenerife, donde se ha dictado una sentencia por discriminación salarial, presentada por mujeres camareras de hotel, que cobraban mucho menos que sus compañeros de trabajo. No queda más remedio, que seguir reivindicando y luchando por esa igualdad salarial, por tener las mismas oportunidades y porque el papel de las mujeres en este mundo cambiante sea cada vez más relevante.

En resumidas cuentas, asistir a este congreso, ha sido como reactivar ese espíritu luchador, esa recarga de energía positiva en un momento especialmente difícil en nuestra ciudad, y esto lo digo, tras comprobar que Ceuta está sufriendo ahora y como siempre nos ocurre, a destiempo, los peores efectos de la crisis económica. Sin embargo, hay que tener esperanza, aún queda mucho por hacer, y somos privilegiados por el lugar que tenemos en el mundo, somos la puerta de Europa en Africa, y así se lo hice constar a Teresa de la Vega quien asistió como ponente a este congreso, y a quien personalmente reproché que estableciera la sede de su fundación “Mujeres por Africa”, en la ciudad de Nador, cuando existen dos ciudades españolas en el continente africano.

Es cierto, que las políticas actuales del gobierno no mejoran la situación, han destruido el espíritu empresarial y comercial en esta ciudad, pues ya nadie se mueve ni emprende sin contar con una subvención o ayuda. Así son las cosas, y lo digo por mi experiencia profesional, duele reconocer que se nos ha acabado la iniciativa, la creatividad, y las ganas de superar nuevos retos. No podemos quedarnos mirando pasar el tren, hay que subirse cuando es oportuno, y ya es el momento...por ello, y haciendo memoria del lema del congreso, hay que establecer la diferencia por las mujeres a través del liderazgo, pero sobre todo, con la acción.