El Gobierno decidió comenzar con la desescalada del Estado de Alarma y desde el sábado –de 6:00 a 10:00 y de 20:00 a 23:00 horas– se permite que los adultos entre 14 y 70 años salgan a correr o pasear. En definitiva, salir a la calle a practicar deporte. Este fin de semana la 'comidilla' del país ha sido el comportamiento exagerado en algunos puntos de España. Las calles, avenidas y parques se llenaron como nunca antes de deportistas andando, paseando o en bicicleta. Algunos ceutíes fueron muy madrugadores y otros prefirieron salir más tarde. Después de 48 días confinados, ¿cuál es la opinión generada sobre la estampa de estos días?
Maite Lagares, acompañada de su hijo por la Plaza de la Constitución, cree que “la gente deseaba salir a la calle y es lo que ha motivado que se haya llenado. Tanto encierro ha provocado esto. Personas que nunca han hecho deporte, es normal que ahora quiera hacerlo. Es lógico después de tanto confinamiento”.
Opina igual que Juan Ruiz, un vecino del centro, que considera “lógica” esa estampa de Ceuta. Pero está tranquilo porque en nuestra ciudad “no se ha visto a tanta gente y aglomeraciones como en otras ciudades. O por lo menos la comparación de lo que he visto en redes sociales”. Asegura que él ha sido testigo de cómo en Ceuta se han “respetado las medidas y distancia de seguridad de los deportistas y transeúntes”.
Guillermo Choquet, otro padre que iba paseando con su pequeña, es de la opinión de que es “normal que todos quisiéramos salir a la calle después de tantos días encerrados”. Y exactamente lo mismo piensa José Riaño, paseando con sus niñas por la Calle Real: “La gente tenía muchas ganas de salir y es normal, lo veo bien mientras se mantenga la distancia de seguridad”.
Son bastantes los ceutíes que piensan esto. Se suma a ello Jesús Porteiro: “Veo bien que la gente se anime a hacer deporte porque no es lo mismo que hacerlo en tu domicilio. Además, hoy al salir me ha dado el sol en la cara y he tenido que cerrar los ojos de tantos días sin pisar la calle”. Él solo ha salido dos días y piensa que se está haciendo bien porque “los que salen a hacer deporte son madrugadores”.
Al contrario que Eva Moreno. Ella piensa que “lo normal es que a las seis de la mañana un sábado no salga nadie, porque no hay que trabajar. Yo no me levantaría a esa hora para hacer deporte si no tengo que ir al trabajo”. Aunque sí que “después de más de un mes sin salir, es normal que la gente haga deporte pero a una hora más tarde”, y eso puede provocar más aglomeraciones. Su conclusión es que entre semana, “como tenemos que trabajar”, los transeúntes disminuirán.
Hay variedad de opinión por la ciudad, al igual que en todos lados. Por eso, hay ceutíes que no ven el peligro al virus mientras que otros son más temerosos. David Pérez, un padre paseando con sus hijas por el Paseo de las Palmeras, cree que el vivir en una ciudad pequeña es una dificultad para mantener las distancias de seguridad para evitar el contagio. “He visto demasiada aglomeración. Aunque entiendo que es difícil mantener las distancias”, cuenta sobre los deportistas de este fin de semana. Aún así “estoy seguro de que aportando todos algo se puede conseguir esta distancia”. Él no ha salido este fin de semana porque se temía lo que iba a pasar, por lo tanto, “únicamente paseo con mis hijas a las horas por las que no pasea tanta gente”.
La dificultad sobre las dimensiones del terreno de Ceuta también las ha visto África Rodríguez, que piensa que “la estampa del fin de semana fue muy peligrosa”. Ni ella ni su familia salieron los dos primeros días, y “en vista de lo que sucedió pienso que hay muchas personas imprudentes”. Por lo tanto, ella solo sale en la hora de los niños para jugar con sus hijos.
En definitiva, ¿qué es una aglomeración para unos y para otros? Todos tienen su opinión formada sobre lo que está pasando y las medidas que el Gobierno está tomando. Los pensamientos de todos concluyen que hay que seguir siendo conscientes de que el coronavirus sigue presente, que sigue matando y hay personas contagiándose. No hay que olvidarse de él. Por lo tanto, hay que continuar siendo responsables y cuidadosos por el bien de la salud pública. Cuanta más responsabilidad, antes saldremos de esta.