El consejero de Economía, Hacienda y Administración Pública del Gobierno de Ceuta, Alberto Gaitán, propondrá este martes al Pleno una modificación de la
Ordenanza Fiscal Reguladora del Impuesto sobre la Producción, los Servicios y la Importación (IPSI) consistente en fijar un nuevo tipo de gravamen del 4%, un 33% inferior al actual, que se eleva al 6%, para las actividades profesionales, artísticas y empresariales.
Hasta 3.400 autónomos podrían beneficiarse de esta sensible rebaja de la presión impositiva sobre el colectivo en la ciudad autónoma, donde el margen diferencial con respecto al IVA peninsular se disparará hasta 17 puntos porcentuales. El listado de beneficiarios va desde los veterinarios hasta los bailarines, deportistas, intérpretes de instrumentos musicales, ingenieros, agentes, economistas, médicos, farmacéuticos, representantes, peritos, astrólogos...
La medida tendrá también, claro, un impacto directo sobre las arcas municipales, que según las estimaciones de los técnicos dejarán de ingresar alrededor de medio millón de euros cada ejercicio.
“La estimación de la pérdida anual de recaudación”, explica el director gerente de Servicios Tributarios en el informe que acompaña el expediente, “es de 500.000 euros una vez analizada la evolución del tributo en el periodo comprendido entre el 1 de septiembre de 2018 y el 31 de agosto de 2019, cuya recaudación real y efectiva se elevó a 1,47 millones de euros”.
No obstante, dado que en el supuesto de que la propuesta de Gaitán sea aprobada por la Corporación su entrada en vigor nunca sería posible antes del 1 de enero, no se ve necesario realizar “ajuste presupuestario alguno” en el presente ejercicio. Sí sería necesario tenerlo en cuenta en la elaboración de las cuentas de la Administración para el próximo año.
El Pleno ya aprobó en primavera del año pasado una modificación de la Ordenanza para rebajar del 9% al 6% el tipo de gravamen sobre las actividades profesionales, artísticas y empresariales, medida cuyo coste para la Hacienda pública en términos de caída de la recaudación se cifró en 250.000 euros durante todo el pasado ejercicio.
El retoque se implementará de nuevo en el apartado segundo del artículo 33 de la Ordenanza, en el que se mantiene en un 10% el tipo sobre los servicios de telecomunicaciones, radiodifusión y televisión y en un 9% los servicios prestados a empresas y los de saneamiento, limpieza y demás.
Eso en la parte más alta de la banda de tipos que contempla el IPSI. Al 6% seguirán cotizando las actividades anexas al transporte terrestre, al marítimo y al aéreo; los depósitos y almacenamiento de mercancías; las agencias de viajes; y las auxiliares y complementarias (intermediarios), así como los servicios de mudanzas.
En la más baja (2%) se cuentan los servicios de bares, cafeterías y restauración, los taxis y el transporte terrestre urbano colectivo. La prestación del servicio de abastecimiento de agua potable solo tributa solamente a un tipo del 1%.
Finalmente, también desde el año pasado y con el objetivo de promocionar el asentamiento de empresas tecnológicas y del sector del juego por Internet, solo pagan un 0,5% de IPSI los servicios de publicidad y similares, los de atención al cliente (call center), el alojamiento de sitios y páginas web y otros a través de redes electrónicas “que, por su naturaleza, estén básicamente automatizados y no tengan viabilidad al margen de la tecnología de la información”.
El IPSI es el impuesto indirecto de carácter municipal que grava, en la forma y condiciones previstas en la Ley y en la Ordenanza, “la producción, elaboración e importación de toda clase de bienes muebles corporales, las prestaciones de servicios y las entregas de bienes inmuebles”.
Está sujeta a su pago la prestación de servicios efectuada por empresarios o profesionales que actúen en el ejercicio de su actividad en los términos previstos en la normativa del IVA salvo que tales operaciones se consideren “de producción o elaboración de bienes”.
Los autónomos han aumentado un 17% en Ceuta en una década
El número de cotizantes a la Seguridad Social como trabajadores autónomos en Ceuta ha aumentado un 17% durante la última década. Si la ciudad arrancó 2009, según los datos de la serie histórica del Ministerio de Trabajo, con 2.906 cotizantes de ese tipo, el pasado mes de agosto se cerró con 3.414, algo más de un centenar por debajo de los números más altos registrados, que se dieron a mediados de 2017, con hasta 3.540 personas con un empleo por cuenta propia. Por secciones de actividad, el comercio y la reparación de vehículos es la que más autónomos concentra en Ceuta (1.601), muy por delante de la Hostelería (368) o la Construcción (202). Hasta 152 hay en Educación y 125 en el campo de Sanidad y Servicios Sociales.
Los compromisos del PP para los autónomos
El Partido Popular concurrió a las elecciones autonómicas y municipales del pasado mes de mayo con el compromiso programático de aumentar doce meses más, hasta los tres años, la tarifa plana vigente para autónomos. También prometió extenderla a los mayores de 52 años, a los parados de larga duración, a los autónomos menores de 30 años y a las personas más vulnerables como las víctimas de violencia de género o los que acrediten un grado de discapacidad superior al 33%. Por añadidura, los de Pablo Casado anunciaron que si de ellos dependía aprobarían una cuota reducida para aquellos autónomos cuyos ingresos no superasen del Salario Mínimo Interprofesional (SMI, 900 euros al mes desde principios de este año) en cómputo anual. Finalmente, garantizó que cumpliría con Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomo en lo tocante a “la participación de los trabajadores autónomos en el Consejo Económico y Social”; que ampliaría la jubilación activa al 100% “a todos los autónomos” y que facilitaría la conciliación de la vida laboral y familiar “con medidas que actúen en diversos ámbitos” removiendo obstáculos.
Las claves
Modificación
Artículo 33. El texto propuesto para la Ordenanza dirá que “las prestaciones de servicios tributarán al tipo general del 4%” y se eliminará la “particularidad” que actualmente establece que “tributarán a un tipo de gravamen de 6% las actividades profesionales, artísticas y empresariales incluidas en el Anexo 3”.
Beneficiarios
Catálogo. Los servicios que tienen la consideración de profesionales incluyen un amplísimo catálogo que va desde directores de cine y teatro hasta subalternos pasando por matadores de toros, ingenieros de todo tipo, agentes, graduados sociales, notarios, registradores, peritos mercantiles, personal docente, médicos, astrólogos y similares, guías de turismo, etcétera.
Sin cambios
Otros tipos. El abastecimiento de agua potable seguirá tributando al tipo del 1% y los bares, cafeterías y la restauración (como los taxis y el transporte terrestre urbano colectivo), al 2%. En el 6% se quedan las actividades de la agrupación 75 del IAE (anexas a los transportes) y al 9%, los servicios de saneamiento, limpieza y demás. En el 10%, el máximo del IPSI, continúan los servicios de telecomunicaciones, radiodifusión y televisión.