El Polillas Atlético de Ceuta acumula ya mucho trabajo físico pero también táctico y técnico. Tras varias semanas de entrenamientos es el momento de iniciar los partidos amistosos, que son parte fundamental de cualquier pretemporada para un equipo de fútbol.
El técnico Raúl Alcázar junto a sus colaboradores ha planificado una pretemporada con mucho trabajo pero también con parte de competición. El club sabe que esta temporada es clave para afianzarse en una Liga muy complicada y de la que descienden un total de cuatro equipos.
La ronda de amistosos se iniciará este viernes día 19 de agosto, con el enfrentamiento ante el Ceuta B de la Tercera RFEF. El conjunto juvenil tiene que medirse a un rival de superior categoría y que además cuenta y con más rodaje en esta pretemporada. A pesar de todo, el Polillas confía en dar una buena imagen y empezar con buen pie esta ronda.
La dificultad es máxima pero para el conjunto de Raúl Alcázar es una buena oportunidad de ver a la nueva plantilla sobre el césped ante un equipo superior. El Polillas se está aclimatando y amoldando al sistema de juego del entrenador y lo hace además con once caras nuevas.
Cuatro amistosos más antes del estreno liguero
La División de Honor exige al máximo a cada equipo pero esta temporada es diferente, ya que no desciende seis sino que solo lo hacen cuatro. Ese es el objetivo del conjunto caballa estar por encima de los cuatro últimos. Por eso en la pretemporada tendrá más amistosos ante equipos juveniles. Algeciras y San Juan serán sus dos últimos rivales antes de comenzar el campeonato liguero el día 4 de septiembre.
El objetivo es llegar a tono al primer compromiso de la temporada, que será fuera de casa ante el Real Betis. Uno de los conjuntos más temidos del grupo y que además juega en casa. El Polillas pretende rendir al máximo en cada campo y no dar por perdido ningún partido. Esta es su segunda temporada en División de Honor.