La policía de Marruecos ha confiscado casi 29 toneladas de hachís en una operación antidroga que comenzó el pasado sábado en la ciudad norteña de Tánger, informó hoy en un comunicado la Dirección General de Seguridad Nacional (DGSN) marroquí.
La operación comenzó la tarde del pasado sábado, 5 de enero, sábado cuando los servicios de seguridad hallaron un alijo de 13,7 toneladas de hachís ocultas en un camión estacionado en el puerto internacional de TangerMed, al este Tánger.
Las investigaciones policiales relacionadas con ese alijo condujeron al descubrimiento anoche de otro camión en el barrio de Bujalef, en la periferia suroeste de Tánger, y que llevaba en su remolque 15,2 toneladas de hachís.
La nota precisó que la investigación preliminar de la policía indica que esa cantidad de droga, escondida en dos camiones con matricula marroquí, pertenece a una red criminal supranacional que ha creado empresas ficticias para facilitar sus actividades delictivas.
Una fuente de seguridad, explicó a Efe que de momento se está realizando una investigación sobre las empresas implicadas en esta operación, y todavía no se han practicado detenciones.
Estos dos alijos están entre los más grandes decomisados en los últimos tiempos en Marruecos, un país considerado primer productor mundial de hachís y principal suministrador para el mercado europeo.
El pasado martes, 8 de enero, el Ejército marroquí abortó otra operación de tráfico de droga y decomisó 3,7 toneladas de hachís junto al muro de defensa erigido en el Sáhara Occidental.
En su último balance, la DGSN reveló que durante todo el año 2018, sus servicios se incautaron de un total de 52,6 toneladas de hachís en diferentes operación, pero en el año anterior fueron el doble. Con 52.000 hectáreas dedicadas al cultivo del canabís, según las últimas cifras disponibles, Marruecos es líder mundial en la producción de hachís y principal proveedor del mercado europeo.