La Local en la frontera: “Cualquier día pueden matar a un policía”

Se llama Orden de Servicio General y va dirigida al control en la rotonda del Tarajal. Firmada por el intendente de la Policía Local de Ceuta, José Antonio Sorroche, ha conseguido algo inaudito en el seno de este Cuerpo: que la práctica mayoría de los policías estén unidos en el descontento hacia su contenido. Aunque también lo deberían estar, por ejemplo, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, porque si la orden se ha dado para responder a la petición de apoyo efectuada por la Delegación del Gobierno, la misma contiene, entre otras lindezas, un punto en el que se le dice a los policías que si hay avalanchas se retiren del lugar.

Los agentes que están haciendo el servicio pertenecen al 092, a una UPAC que ya está desintegrada y que hace todo menos la función para la que fue creada (atender las barriadas) y la UIR. Su misión, sobre el papel, es ciertamente confusa porque se les dice que están para hacer cumplir “las ordenanzas municipales” con especial atención a la venta ambulante, el buen uso de los espacios públicos en la zona de la rotonda del Tarajal, para mejorar la imagen de entrada desde Marruecos a Ceuta.

Los policías advierten de que la venta ambulante en esa zona supuestamente ya está controlada por el GOA, por lo que no entienden que se les envíe “a un embudo” solo “por buenismo” porque “cualquier día pueden matar a un policía”, explican. Se deja constancia en la orden de que en el caso de producirse “grandes avalanchas que traten de cruzar la frontera” la pareja que esté de servicio “previa comunicación al mano, se retirará del lugar y se mantendrá a una distancia de seguridad”. Es decir, se les ordena estar en una carretera nacional para hacer un servicio que supuestamente ya se hace pero, de producirse una concentración, tienen que ‘dejar vendidos’ a los escasos guardias civiles que vigilan el Tarajal.

Pero hay más. Se les dice también que si por “la densidad del tráfico no pudieran abandonar la zona, buscarán refugio en el puesto fronterizo hasta que la situación queda normalizada” y el “vehículo se estacionará en una zona segura que permita la salida en caso de necesidad”. ¿Qué tienen que hacer los policías? Controlar a los vendedores sin licencia o prestar servicios rotativos entre las rotondas de Tarajal y hasta la Almadraba. Y otra ‘lindeza’, se les dice que si observan alguna incidencia en el tráfico rodado, al ser un punto de carretera nacional, se tendrá que comunicar lo ocurrido a la Guardia Civil, sin que esas incidencias “sean motivos de distracción para los policías locales que, exclusivamente, velarán por el cumplimiento de las ordenanzas municipales salvo casos de fuerza mayor.

Usar a policías de forma partidista

Los agentes saben que, en la práctica, nada será así. Por eso los sindicatos están revolucionados y hay quienes como CSIF ya avanzan que judicializarán esta orden, denunciando que se usa a los locales de “forma partidista” para que la Ciudad “mantenga sus buenas relaciones con el PSOE”.

“No tiene parangón alguno sustentarse en que la Policía Local va a realizar las labores propias de su competencia al referirse a la venta ambulante cuando, con la aprobación de la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana, en su artículo 37.7 refleja que Se entenderá incluida en este supuesto la ocupación de la vía pública para la venta ambulante no autorizada, lo que deja claro que dichas competencias también forman parte de las competencias de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad el Estado”, denuncia CSIF.

“Ha quedado meridianamente claro después de las declaraciones del Presidente que dicho servicio se ha establecido por una petición política debido a la falta de efectivos por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil y esto es algo que se soluciona dotando de más medios humanos a dichos cuerpos y no de la forma en que pretenden hacerlo para así evitar lo que tienen que hacer, que es dotar a la Policía Nacional y a la Guardia civil de todos los efectivos que sea necesarios, como así vienen reivindicando dichos colectivos desde hace años”, añade el sindicato.

“Destinando efectivos de la Policía Local al paso fronterizo provoca directamente además que se reduzca el número que se encuentra en las barriadas de la ciudad y atendiendo directamente a los ciudadanos”. CSIF denuncia que en la orden se exponen puntos en los que se indica a los agentes que si las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado necesitan “auxilio”, mejor “salir corriendo o esconderse”.

“No vamos a permitir que se vulnere o tergiverse la legislación pudiendo provocar un problema a la seguridad jurídica de los agentes de Policía Local para evitar dotar de los medios humanos necesarios a otros cuerpos. Vamos a actuar de todas las formas que estén a nuestra disposición para que este sin sentido se anule de forma inmediata y por supuesto siempre acudiremos en auxilio de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado siempre que lo soliciten”.

Apoyo de la Confederación de Empresarios y de la Cámara

Desde la Confederación de Empresarios y Cámara de Comercio de Ceuta, han querido mostrar el apoyo de ambas instituciones a la labor de coordinación que en materia de seguridad y lucha contra el fraude en las cercanías de la Frontera del Tarajal , que ha emprendido la Ciudad Autónoma con la Delegación de Gobierno.

Han concretado que en una "materia tan importante que afecta a los intereses de toda la población" y de la que depende gran parte de la economía de Ceuta, "es necesario que todas las instituciones trabajen de forma conjunta" para garantizar la seguridad y el desarrollo económico y de empleo.