Nadie duda de que en nuestra democracia existen tres poderes independientes, el legislativo, el ejecutivo y el JUDICIAL, y para mi el más fundamental es el judicial, es el que dictamina, resuelve y sentencia todas aquellas cuestiones relacionadas con el ejercicio de nuestros derechos y libertades así como la violación por parte de cualquier ciudadano o ente público de lo establecido en la Constitución o cualquier otra Ley penal, civil o administrativa.
Por lo dicho este Poder del Estado ha de ser independiente y apolítico para que todos podamos confiar en que sus decisiones y sentencias son justas y hacen que nos sintamos seguros jurídicamente.
No se puede consentir ni aceptar que cualquier otro poder interfiera en esa independencia intentando que el nombramiento de los Vocales del Consejo General del Poder Judicial se nombren bajo criterios políticos y por los partidos políticos. Lo ideal sería que fueran elegidos por los Jueces en ejercicio, quien mejor que ellos conocen a aquellos que han de gobernar el poder judicial.
Todos, todos critican el proyecto de cambiar la Ley para su elección, las Asociaciones de Jueces y Fiscales, partidos políticos, hasta la Unión Europea y sobretodo nosotros los ciudadanos que somos a fin de cuentas los receptores de las decisiones que adopten los Jueces. Seamos fieles a la Constitución y a la Democracia y a su espíritu por el bien de todos.