Comisiones Obreras y el resto de organizaciones sindicales con representación en la entidad bancaria de CaixaBank han convocado para el próximo martes 22 de junio la primera huelga de 24 horas. En apoyo a esta convocatorio, se realizará en Ceuta una concentración para protestar contra el despido forzosos de 8.291 trabajadores, de los que 1.100 estaría en Andalucía, Ceuta y Melilla, y contra el recorte de condiciones laborales. El acuerdo para formalizar el ERE en la entidad participada por el Estado todavía se encuentra lejos y los representantes de los trabajadores han optado por movilizar a la plantilla. En este caso la convocatoria cuenta con el respaldo de todas las fuerzas sindicales del banco.
Y esta decisión se produce ante la falta de avances suficientes en la mesa de negociación ante un ERE que la representación sindical ha definido como “salvaje que dinamita la paz social en Caixabank”, afirman en su comunicado. Estos despidos forzosos afectarán a 16 personas en la plantilla de la entidad en Ceuta. La negociación del ERE en CaixaBank comenzó hace más de mes y medio, pero el acuerdo no llega. De hecho, ya se tuvo que ampliar el periodo legal de la mesa de negociación, que venció a principios de junio sin que se sellase un acuerdo.
Esta acción es la tercera que se convoca en CaixaBank tras dos paros parciales previos e junio, paralizaciones que fueron seguidos por un 87% de la plantilla. CCOO confía en que el seguimiento de la huelga y el cierre de los centros de trabajo sea masivo, toda vez que “a estas alturas de la negociación, las condiciones del ERE siguen siendo salvajes”. Se producirá una concentración del personal del banco en la Plaza de los Reyes de 10:00 a 12:00 horas para mostrar el rechazo de la plantilla ante el inmovilismo de las negociaciones.
Agitación en el sector bancario
El sector bancario se encuentra en época de agitación ante las fusiones de entidades, como es el caso de CaixaBank, sin embargo otras entidades como BBVA le siguen de cerca, protagonizando esta última la primera huelga realizada por los trabajadores del sector bancario desde la década de los 80.
Las negociaciones entre los distintos sindicatos que tienen representación en las entidades son continúas en aras de reducir el número de despidos y mejorar las condiciones en las que éstos se producen. Los sindicatos mantienen su oposición al ERE tal y como está propuesto y, entre otras cuestiones, piden que se retire de la mesa la posibilidad de los despidos forzosos. Además, han manifestado su "profundo malestar" por el plan de recolocaciones que el banco ha ofrecido a los sindicatos.