Es mediodía y los bajos del portal D del bloque 4 de Miramar Bajo bullen de actividad en Ceuta. En varias mesas se trabaja la lectura individualmente. Junto a la entrada, en un rincón acondicionado con mobiliario y decoración infantil, varias madres comparten un rato con sus hijos más pequeños. Al otro lado de la sala, más de una decena de mujeres aprenden a confeccionar currículums o a hacer todo tipo de trámites por Internet.
María Hamed es la directora del Taller de alfabetización digital e idiomática para mujeres que la Fundación SAMU desarrolla en la ciudad desde finales del año pasado. Concluirá en julio y a estas alturas, a mitad de camino, ya se ha convertido en uno de los que la entidad andaluza, con miles de trabajadores en toda España y el extranjero, mira con más cariño.
En Ceuta ha contratado a nueve personas (tres maestras, una orientadora, cuatro monitoras y una administrativa), todas de la ciudad, según subraya Eva fuentes, técnica de la fundación, que se desplaza con asiduidad a este lado del Estrecho para comprobar de primera mano el desarrollo de la iniciativa, que actualmente trabaja con 22 mujeres desempleadas y tiene como techo llegar a hacerlo con un máximo de treinta durante toda su ejecución.
Ambas coinciden en la descripción de una iniciativa que se financia con una subvención de algo más de 140.000 euros del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE), que a finales del año pasado dejó en manos de ocho oenegés la implementación de pequeños planes de empleo para la realización de servicios “de interés general y social”.
Azeza Ezzouak (usuaria): "A mí participar en este proyecto me ha cambiado el ritmo de mi vida"
“Es un proyecto único en el que hemos formado un equipo maravilloso, muy implicado humanamente más allá de lo profesional y del componente estrictamente formativo”, valora Fuentes, que como la directora del proyecto incide en que se trabajan “todas las piezas del puzle” de la integración.
El primer escalón es al que alude el título del taller, la cualificación digital y en castellano de las beneficiarias, que son seleccionadas por el SEPE, pero su alcance final es mucho más ambicioso.
“A mí me ha cambiado el ritmo de mi vida”, dice con una sonrisa Azeza Ezzouak, vecina de Loma Margarita, mientras practica la lectura en español con Fati Yerrai, una de las dos maestras dedicada a esa formación.
Younes Aikar es el tercer docente incorporado y la suya es la vertiente digital. “Empezamos por lo más básico, la mecanografía, y en función del nivel de partida de cada persona vamos incidiendo en distintos aspectos: la elaboración de currículums, la confección de trabajos en Word o Powerpoint, la navegación por Internet...”, expone rodeado de sus alumnas, con las que cada dos semanas se organizan visitas a museos y otros espacios.
“El objetivo es que cuando las usuarias salgan de aquí sepan lo que hay en el mundo exterior, que conozcan más recursos y oportunidades”, completa Fatima Sohora Ahmed sobre las prioridades del trabajo con un grupo de mujeres muy “heterogéneo” en el que también se aborda el empoderamiento y la igualdad.
Según Fuentes “el desafío es atender las necesidades reales de cada mujer, las laborales y las personales, para abrirles puertas hacia la formación reglada si así lo desean, para conseguir un empleo, para ser más independientes...”.
Así, Aikar prima ante las pantallas de los ordenadores “enseñar a dominar lo más práctico” de manera “coordinada” con sus compañeras. “Al final la escritura debe tener la misma base, ya sea con un bolígrafo o con un ordenador”, justifica Insaf Abdelkader, “y es fundamental para poder llegar a dominar herramientas fundamentales en la actualidad para realizar trámites administrativos, solicitar citas en distintos servicios...
La técnica de SAMU valora todas las “ayudas y facilidades” que ha puesto el SEPE para el desarrollo del proyecto y el director provincial del organismo, José Simón, alaba, a su vez, la forma en que se ha implementado la iniciativa, en la que se ha dado cabida a usuarias que comparten un perfil de bajo nivel educativo y desempleo de larga duración, pero con muchas diferencias, ya que de lunes a viernes de 9.00 a 14.00 horas se recibe desde a madres con varios hijos hasta “a una abuela que acude con su nieto”.
“Es muy gratificante”, apuntan Hamed, Fuentes y Simón, “que a través de una metodología flexible y adaptada a cada mujer se ha conseguido fidelizarlas y no por temor a una penalización del SEPE, sino por la motivación que genera ver el avance que consiguen según van encajando las piezas de cada itinerario personal de inserción que se propone para que tengan un futuro”.
La Dirección General del SEPE ve el proyecto como “buena práctica”
La Dirección General del Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE) ha considerado el proyecto que desarrolla la Fundación SAMU en Miramar como una “buena práctica” a nivel nacional, según se congratula el director provincial del organismo, José Simón. Esta iniciativa fue la que recibió una subvención más elevada, por encima de 140.000 euros, en la convocatoria en régimen de concurrencia competitiva para instituciones sin ánimo de lucro que contratasen trabajadores para realización de servicios de interés general y social, resuelta en diciembre. Plena Inclusión vio aceptadas dos propuestas, como la Asociación Autismo, los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca y la Real Federación de Fútbol de Ceuta. También se han financiado proyectos de Cáritas, la asociación Síndrome de Down y Cocemfe (uno de cada una).