Visto para sentencia ha quedado el juicio contra S.M. por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y de falsedad documental por el que el Ministerio Fiscal le pide un año de cárcel y una multa de 1.800 euros. S.M. está acusado de haber cruzado el
control de pasajeros de la estación marítima acompañando a una marroquí que portaba el DNI de otra persona. Se da la circunstancia de que unas horas antes el acusado también había pasado el mismo control de acceso al ferry acompañado de la titular del documento de identidad. Según las manifestaciones del policía nacional que lo interceptó en el control de embarque, y basándose en las imágenes captadas por cámaras de seguridad, S.M. habría cruzado la frontera acompañado por la legítima propietaria del DNI. Posteriormente, pasaron el control de los funcionarios de seguridad y al llegar a la zona de espera antes del embarque, el acusado volvió a salir de la estación marítima, supuestamente con el documento que le entregó la mujer y con el que, horas más tarde, volvió a intentar el pase, en esta ocasión con otra mujer, de origen marroquí, que fue interceptada después de que uno de los agentes reconociera que ese DNI ya había sido utilizado anteriormente por su propietaria. En su defensa, el acusado alegó que vive en Madrid y que había viajado hasta Marruecos durante dos días para visitar a su madre enferma. Aseguró que, a pesar de que cruzó el control de embarque para regresar a la Península, finalmente optó por no embarcar ya que advirtió que debía renovar la carta verde necesaria para cruzar a Marruecos y que en el momento en que fue detenido intentaba explicar esta cuestión a uno de los policías, hecho que el testigo catalogó como una “técnica de distracción” para permitir que la persona indocumentada no fuera interceptada. Durante la vista oral celebrada en el Juzgado de lo Penal número 1 se visionó el momento en que el acusado cruzó la frontera acompañado por la propietaria del DNI y, posteriormente, cómo cruzaba con ella el embarque para, seguidamente salir de la estación y horas más tarde volver a cruzar con la marroquí. La propietaria del DNI fue detenida en Madrid después de denunciar la desaparición de su documento y está acusada de un delito de falsedad documental.