Antes de nada hacer una pequeña aclaración, no creo que haya perros peligrosos, sino más bien dueños irresponsables. Hay razas de perros que no deben estar en manos de propietarios desaprensivos, faltos de madurez, con poca experiencia en comportamiento canino, etc. Aunque a decir verdad, ningún animal grande o pequeño debería estar en manos de ningún propietario que no lo cuide bien.
Hecha está aclaración, decir que es raro el barrio donde no hay algunos propietarios de perros peligrosos que los llevan sin bozal, suelto, sin licencia para la tenencia de animales peligrosos, seguro obligatorio. Este tipo de comportamientos suele crear mucha inseguridad en los vecinos que se ven obligados a tener que soportar el miedo que infunden estos perros por la irresponsabilidad de su propietario.
Hace unos días que un perro de presa, que su propietario lo llevaba suelto y sin bozal por el patio de los pisos militares de la barriada del Mixto, le mordió a un Yorsay (perro pequeño) de una vecina en la cabeza. Las heridas que le causó fueron de bastante consideración y tuvo que ser atendido de urgencias en la clínica veterinaria de Alfonso Morey. Lo más probable es que tenga que ser operado de la mandíbula debido a la fuerte mordedura que sufrió. El charco de sangre que quedó en el suelo dejaba ver que el perrito estaba grave. Este perro peligroso no era la primera vez que le mordía a otro perro.
Si este episodio ocurría en la barriada del Mixto, unos días antes otro perro (pastor alemán), en manos de un propietario irresponsable, que también lo pasea sin correo ni bozal, mordió a otro perro de mediana estatura. Esto ocurría en los bajos de la Marina. El perro requirió ser atendido de urgencias en la clínica veterinaria de Real 90, lo que le costó al propietario 70 euros. El dinero es lo de menos en comparación con el susto que se llevaron. En este caso, a pesar de haberle causado heridas, la gravedad no fue tanta.
Está claro que los perros peligrosos están causando bastante alarma social en las barriadas y sitios comunes donde la gente va a pasar un rato agradable, el cual a veces deja de serlo. La gente tiene miedo a denunciar a estos incívicos porque muchos de ellos son niñatos que te amenazan y encima te insultan. Otros, aun siendo más mayorcitos, son personas de poco cumplir las normas.
El Ayuntamiento, dentro de sus competencias, debería de hacer una campaña, por un lado divulgativa para que los propietarios de estos perros se conciencien del riego y alarma social que crean. Y por otro lado, de sanción a todo el que incumplan estas normas. Solo hace falta que la policía local se de una vuelta por las barriadas, bajos de la Marina, etc. Las cuantías de las sanciones son bastante elevadas, por lo tanto solo hace falta aplicar la ley y ordenanzas municipales, que para eso están.