Quienes suelen visitar
el parque de Santa Catalina en Ceuta no están conformes con la iluminación del lugar, entre otras cosas. Pero, sobre este tema en específico, denuncian que son apenas cuatro las farolas que se encienden cuando cae la noche, lo que consideran insuficiente para poder hacer uso de estas instalaciones de una manera segura, sin correr ningún riesgo. Los afectados aseguran que es una situación que se ha extendido durante unos seis meses aproximadamente o quizás un poco más de eso, sin que se haga nada al respecto. “Hay algunos que salimos tarde del trabajo y que queremos aprovechar sacando al niño por la tarde al parque que hay dentro o al merendero y apenas hay iluminación”, es la queja de uno de los denunciantes. La preocupación viene porque comentan que “más de un susto” se han tenido que llevar debido a la presencia de socavones en la tierra que no pueden ver a tiempo debido a la falta de iluminación. Hasta los momentos no ha habido ninguna situación que lamentar, aunque el riesgo es constante.
Pero, sobre el parque de Santa Catalina y sus alrededores, el tema de la iluminación no es la única queja. Hace apenas unos días, una vecina de Ceuta
hacía referencia a la zona de ejercicios, asegurando también que era un peligro para los niños. En esa oportunidad, la denunciante señaló que toda la zona del parque que estaba destinada al ejercicio físico se encuentra completamente oxidada y que “es simplemente inservible''. Fue a mediados de este mismo año cuando se informó que
el Consejo de Gobierno de Ceuta había aprobado
un gasto plurianual de algo más de 4 millones de euros para conseguir que el parque de Santa Catalina se convierta de verdad en el vergel que se prometió hace ocho años, cuando se acometió la segunda fase del sellado definitivo del antiguo vertedero.