A pesar de ser sabidos por todos, es difícil de recabar información sobre las peleas de perros. Nadie quiere saber nada, la contestación de la mayoría es: “no digas que te lo he dicho yo”, “yo no quiero problemas”. Las instituciones poco o nada hacen al respecto. Las asociaciones protectoras de animales temen de las represalias y no pueden hablar. Es comprensible el miedo de las asociaciones, no en vano estamos hablando de verdaderos delincuentes, que no dudarían en vengarse de la forma más ruin. Lo que no es tan comprensible que las instituciones responsables no den con los lugares donde se están llevando a cabo las peleas. Lugar que todos los preguntados sitúan en la barriada del Príncipe Felipe. Al igual que coinciden al señalar las zonas donde hay perros que presuntamente sus dueños los entrenan para llevarlos al Príncipe a pelear. Estas barriadas son: Avenida de Madrid, Pedro La Mata, 108 viviendas, San Amaro, Juan Carlos I, Juan XXIII, Zona de El Sarchal. Concretamente, en la barriada de San Amaro, hay varios perros peligrosos que los pasean a plena luz del día, a la vista de todos.
También se está dando el caso de chavales jóvenes, incluso menores de edad, que llevan cachorros de pitbull, que dicen que se lo han “regalado” individuos que viven en la barriada del Príncipe, bajo la condición de que una vez sean adultos los lleven para entrenar a sus perros.
En estas peleas se estarían llevando acabo apuestas de dinero en las que también están participando marroquíes.
No hace mucho que un pitbull fue encontrado en las inmediaciones del Príncipe y no llevaba microchip. Otro pitbull lo encontró la policía por la calle, este si tenía microchip, con lo cual si pudieron abrir expediente. Ambos tenían algunas heridas, todo apunta a que fueron utilizados en alguna pelea. También es significativo, que en un corto periodo de tiempo se han registrado dos intentos de robos en la protectora. No creo que fuesen a robar pienso, más bien iban a robar perros de raza peligrosas para utilizarlos de sparring.
La guardia civil, a través del servicio de protección a la naturaleza (SEPRONA), es la encargada de investigar sobre las peleas de perros, ya que también ejerce de policía judicial. Según se desprende de las estadísticas, los resultados no han sido muy buenos. Que se sepa, no se ha desarticulado ninguna red que se dedique a las peleas de perros. Tampoco se ha detenido a nadie por organizar peleas, salvo a unos menores en la barriada de Juan XXIII, y esto fue hace más de un año.