Marruecos y la Unión Europea (UE) rubricaron hoy en Rabat el nuevo acuerdo pesquero para los próximos cuatro años, que permitirá el acceso de 128 barcos comunitarios (dos más que el anterior) al caladero marroquí y que incluye también las aguas del Sáhara Occidental. En el acto de rúbrica celebrado en Rabat, el ministro de Agricultura y Pesca marroquí, Aziz Ajanuch, subrayó el aumento de la contrapartida financiera hasta los 52 millones de euros anuales, en lugar de los 40 millones en el anterior pacto. De esta contrapartida económica, más de 40 millones de euros anuales serán pagados por la Comisión Europea y los otros 12 millones de euros los abonarán los armadores europeos que se beneficiarán de las licencias de pesca expedidas. Ajanuch subrayó que esta compensación se destinará a "la población que la merece en las zonas donde se pescará" y se invertirá en programas sociales y económicos, así como para la reestructuración del sector pesquero. "En nuestras negociaciones nos hemos orientado hacia la sostenibilidad. Es un acuerdo equilibrado", aseveró Ajanuch, quien explicó que en el acuerdo se excluye la pesca en las aguas del Mediterráneo y tampoco se podrá pescar algunas especies sensibles como el pulpo y la gamba. Además, las partes pactaron también incrementar las capturas de los busques europeos hasta 100.000 toneladas por año de pequeños pelágicos (en lugar de los 85.000 toneladas estipuladas en el anterior acuerdo) y 7.000 toneladas por año de especies demersales. La flota europea, según el nuevo texto, podrá acceder a las aguas que se extienden del paralelo 20 al 35, desde el cabo Espartel -en la costa atlántica a pocos kilómetros de la ciudad norteña de Tánger- y hasta el Cabo Blanco, en la costa atlántica del Sáhara Occidental. El nuevo acuerdo fue rubricado hoy en Rabat por la secretaria general del Ministerio marroquí de Pesca, Zakia Driouch; el embajador director general de relaciones bilaterales en el Ministerio marroquí de Exteriores, Fuad Yazough, y la embajadora de la Delegación de la UE en Rabat, Claudia Wiedey. El anterior protocolo de pesca, de una duración de cuatro años, expiró el pasado 14 de julio y obligó entonces a los barcos europeos a abandonar el caladero marroquí.