Voy a comenzar diciendo que añoro, como muchos españoles, el Partido Socialista de Felipe Gonzalez, Rubalcaba, Corcuera, Leguina y otros muchos que gobernaron España durante más de diez años y los españoles progresamos en todos los órdenes, en una época difícil en lo económico y en lo social y añoro a ese Partido Siocialista porque era un partido de Estado y constitucionalista al cien por cien, con políticos que priorizabán la integridad de España y su unidad conociendo en profundidad a los enemigos.
Hoy no puedo decir eso, Pedro Sanchez se ha echado en manos de Pablo Iglesias con quien, según decía, no podría dormir si pactaba con el, y con los independentistas y con los herederos de Batasuna y.....más y más. Pablo Iglesias, comunista chavista bolivariano, con mis respetos a los comunistas que hicieron posible la reconciliación nacional con el resto de partidos de la transición, es un provocador, progre millonario, no dando ejemplo de lo que predica, que en la Comisión de Reconstruccion acusó al tercer grupo parlamentario del Congreso con 4.000.000 de españoles que les dieron su confianza, VOX, de querer dar un golpe de estado, acusación que es más un grave insulto a un partido político legal y que provocó que el diputado de VOX abandonara la sesión siendo despedido por Pablo el PROVOCADOR con una expresión propia de un macarra "cierre la puerta al salir" que a todos los demócratas nos ha provocado asco. Me da igual que haya sido VOX que cualquier otro partido político, esas conductas son propias de un chulo de barrio y no de un Vicepresidente del Gobierno.
Pedro Sanchez, recapacita sobre donde te van a conducir estos socios, busca, pero de verdad, apoyos en los partidos que representan a la mitad de los españoles, haz posible un Gobierno fuerte que no ceda un día si y otro también a los chantajes, pactos de Estado con partidos constitucionalistas que te apoyen y gobierna en solitario, es posible si te bajas de tu pedestal, contarías con más de 200 diputados empujando para salir de la grave situación que padece España.
No soy más que un jubilado pero me importa mi país, mis conciudadanos y su bienestar. Por el camino que vamos caeremos en el precipicio.