La orden judicial ‘fantasma’ que paralizó las devoluciones en Ceuta

El presidente del Gobierno de Ceuta, Juan Vivas, y la vicepresidenta primera del Ejecutivo local, Mabel Deu, han comparecido en una rueda de prensa extraordinaria para informar sobre el proceso de retorno iniciado con los menores marroquíes y que ha sido paralizado durante 72 horas. Paralizado sin que se sepa quién ha dado esa orden, que más parece tener un origen de cautela que tener un fundamento judicial porque a fecha de hoy, 24 horas después de que la propia Deu lo dijera a los medios de comunicación, nadie sabe dar ni con ese auto ni con el procedimiento que ordena el paro, ni tampoco se sabe el juzgado que lo ha ordenado, si es que lo hay. Tampoco parece importar mucho a la Ciudad saberlo. El propio Vivas ha recalcado a los periodistas que hay que “presumir” esa paralización después del auto del Juzgado Contencioso número 1 que paralizaba el retorno de 9 menores porque se aludía al procedimiento en general seguido, haciendo por tanto “referencia a la globalidad, por lo que lo prudente era esperar”. Ese auto solo se refiere a esos 9 casos, pero del mismo se deriva la solicitud de documentación a la Delegación de todo el proceso, lo que habría motivado que, por propia voluntad, las instituciones hayan optado por detenerse en los siguientes traslados acordados con Marruecos. En la rueda de prensa, confusa en este punto en concreto, se ha asegurado que la Ciudad recibe una notificación de la Delegación del Gobierno sobre la necesidad de aportar al Juzgado documentos sobre las repatriaciones, lo que les llevó a parar las salidas. Una documentación pedida por el Contencioso. Es decir, que contrario a lo manifestado este lunes por el Gobierno local, las devoluciones en su globalidad no las para un juzgado concreto o, al menos, ni lo saben porque no tienen un auto ordenándolo, sino que se hacen “por prudencia” y en base a esas conversaciones que son constantes con la Delegación del Gobierno. Eso sí, al margen de esta decisión, Vivas ha querido recalcar que confía “en la justicia” sin que la parezca relevante que sea “un juez u otro” el que lo dicte.

Sobre las fugas de los menores

En cuanto a las fugas de menores de los distintos recursos establecidos para su acogida tras la entrada masiva de mayo, Vivas las ha encuadrado en las que habitualmente se producen sin que haya habido “un incremento significativo” de esas ausencias derivadas directamente del proceso de devolución. Es decir, no hay una “causa, efecto”. En el puerto permanece gran cantidad de niños que dicen haberse escapado del ‘Santa Amelia’ porque no quieren ir a Marruecos. Son decenas pero hay más escondidos en otros sitios. De acuerdo con los informes recabados por la Ciudad, no sería una consecuencia directa de estas salidas.