La Semana Santa de 2019

Dentro de poco no quedará del recuerdo de las procesiones ni la cera de las calles. Entre limpiezas matutinas, comuniones y política, más pronto que tarde nos olvidaremos de ello y estaremos en otras cosas. Así es la vida.

La semana de procesiones -y la anterior- dejó algunas estampas dignas de figurar en la antología cofrade ceutí, bien tras entrevistar a hermanos mayores, mayordomos, capataces y cofrades diversos o bien tras participar estos como colaboradores de radio y televisión. Entiendo que no todas las opiniones dadas resultan “homologables” y que hay mucho que poner al día todavía.

Me ha sorprendiendo, para bueno, el trabajo realizado en directo por Radio Televisión Ceuta, así como El Faro Digital, cuyos profesionales estaban por todos lados. Han hecho tantos kilómetros como las cofradías, seguro. Se impone ya, vista la utilidad y servicio que prestan los medios al caso, hacer mejor las cosas, preparando a los contertulios en la gran tarea que se les brinda y que tomen conciencia estos de que esta labor ayuda -y mucho- a las cofradías. Este esfuerzo de los medios de comunicación local y sus profesionales (El Faro, El Pueblo, y sobre todo rtvce) se tiene que ver recompensado, además de con buenos momentos de grabación o fotos como los servidos, con buena información y opiniones de calidad de los contertulios. En cualquier caso, los ciudadanos en general y las cofradías en particular, habrán de reconocer el duro trabajo de aquellos, así como las horas de cámara estática en una torre o a pie de grúa; y como no, las horas de programación que han puesto a disposición del ciudadano. Hay que felicitar por lo tanto a Coronado, responsable del programa que lo dirige y coordina, y a Mariscal, su segundo omnipresente en estos días. Todos han hecho posible que tengamos imágenes de nuestra Semana Santa, hoy que bien cierto es que lo que no se ve no existe.

Dicho esto pongo mi atención sobre las cofradías y su forma de estar en la calle que, a Dios gracias, mejora cada año, tanto en número de nazarenos como en estilo, situándose actualmente a un nivel que podemos considerar muy bueno. Todos sabemos que con la limitación de cifras que tenemos debido a nuestra insularidad. De todos depende que esto mejore y en ello debe ponerse cierto empeño común, sabiendo que el mal ejemplo de una afecta a todos. Y bien es verdad que, como dicen los juristas, “no todo vale…”

Si valen, y mucho, los cortejos de nazarenos negros del Silencio, Valle y Veracruz y la ausente de este año Amargura (seminegros), donde hasta los más jóvenes se comportan bien; son cortejos cortos (algo más numeroso el último) pero muy disciplinados, bien vestidos, rigurosos y normalmente de nazarenos adultos.

Hablar de Los Remedios es cuestión aparte y se necesitaría una reflexión profunda solo para ella”

Cofradías de mayor número de hermanos, como Flagelación, Nazareno, Encrucijada y Pollinica son más relajadas en sus cortejos, con buen estilo y buen nivel de túnicas y enseres, lo que hace que los nazarenos se presenten con dignidad y las cofradías tengan una solvente estética procesional. Cierto es que estas siguen teniendo asignaturas pendientes como el uso de calzado deportivo o la excesiva asistencias de padres por fuera, pero serían asuntos menores a perfeccionar.

Otras, como Penas y Medinaceli, mantienen también buen nivel en sus nazarenos y saben estar en la calle, aunque han pasado a tener cortejos más pequeños que, o bien no se corresponden con lo que han sido o no les hace justicia la devoción que sigue a sus Titulares. El caso de las Penas es paradigmático, en cuanto a lo que una hermanad no debe poner en la calle como penitentes: niños con cruces. No sólo molesta a la vista tal cosa, es que no tiene sentido un tramo así, siempre será mejor ofrecerles un cirio u otro enser menor.

En cuanto a los pasos en general han sido bien llevados, destacando el misterio y palio de la Flagelación, así como el palio de Medinaceli. Estos palios no pierden el compás ni se desarbolan, al contrario de otros que abusan de voces, movimiento de bambalinas y llamadas un tanto estridentes, hoy ya manidas formas para más bien para la concurrencia que para los de abajo.

Hablar de los Remedios es cuestión aparte y se necesitaría una reflexión profunda sólo para ella. Tiene un cortejo pequeño que procesiona dignamente, que mantiene la compostura y el orden, pero que lleva estos seis últimos años sin hacer la salida penitencial con la dignidad que las cofradías se deben y su particular historia merece. Años de problemas en los pasos, ahora tienen un problema conjunto de hermandad y cofradía serio. Solventarlo no será posible sin pasar por un periodo de renovación de personas e ideas. La ambición, que puede ser muy legítima, a veces desnorta y enreda a los cofrades apartándolos de los objetivos principales que deben atender. Acometer la reforma de los pasos, la nueva estética procesional, obras en la capilla, obras en la iglesia, el local social, la Titular de Gloria y advocación de la Parroquia… son demasiados cambios, demasiadas obras, demasiados asuntos para no sucumbir en el intento. Ya han tenido tiempo suficiente para desarrollar un proyecto que se ha mostrado con pies de barro, donde la beneficiaria realmente ha sido la parroquia pero no la Hermandad. Lo sucedido el viernes Santo en la calle está más cerca del escándalo cofrade que otras cuestiones recientemente en otra hermandad -que por dolorosa que fuere quedó en el ámbito de lo personal-, ahora está afectada de lleno la propia institución cofrade y sus gentes.

¿Faltan jóvenes o falta hermandad?, ¿no será quizá ausencia de devociones? El asunto merece detenerse”

Cierto es que algunas hermandades tienen dificultades para hacer cuadrillas de futuro, lo vemos en los palios de Soledad, Desamparo y Mayor Dolor. Desde antiguo en el paso de Encrucijada y ahora también en Buena Muerte. ¿Pero faltan jóvenes o falta hermandad? ¿No será quizá ausencia de devociones? El asunto merece detenerse un momento en esta cuestión y entender realmente lo que alienta esta actividad: Creo que la gran ausente es la devoción religiosa, la falta de vínculo afectivo tipo compromiso-sacrificio a una causa. La devoción se establece entre un cofrade y la imagen a través de una historia personal y/o familiar, pasando de ser una imagen a ser “su Bendita Imagen”. Santo Tomás de Aquino escribió hace casi 900 años que “el culto de la religión no se dirige a las imágenes en sí mismas como realidades, sino que las mira bajo su aspecto propio de imágenes que nos conducen a Dios encarnado…”. Para el cofrade la imagen (su Imagen) forma parte de su cotidianidad y está presente en su casa, en el trabajo, en la enfermedad y en la salud, en su matrimonio y en el nacimiento de sus hijos y hasta en la muerte. Será, en todo caso, la imagen real que él, devoto cofrade, ha decidido que tiene el Hijo de Dios y su Madre y los tratará con familiaridad y respeto. Pero saben que el culto que se ofrece no es a la imagen sino que se dirige a la realidad que representa. ¿Un devoto de cofradía que vive así sus devociones dirá entonces que no si le pide salir de nazareno, penitente o costalero según sus posibilidades? Claro que no. ¿Hay en Ceuta muchas devociones que se viven así? Honestamente me respondo que no lo creo.

Pretender solucionar el problema por la vía de los amigos, novedad costalera... no es solución de futuro”

Pretender solucionar el problema por la vía de los amigos, novedad costalera, o por compromiso personal con un capataz no es solución de futuro. El futuro pasa por crear y alimentar la devoción necesaria a las imágenes Titulares de las hermandades o, en su caso, tener capacidad de contratación. Lo primero es difícil de crear, necesita tiempo y circunstancias propicias, y estos tiempos de avance de la increencia generalizada en que vivimos no lo pone fácil; lo segundo parece posible, aunque más bien con costaleros de afuera, así que, a lo mejor, deberíamos acudir a otros lugares como hacen con la música.

No podemos dejar pasar singularidades de este año, como la Vera Cruz que sigue sin encontrar su estilo y no parece que se vaya a enmendar aunque al lunes fuere. Ir a este día es una opción, como ser de silencio, pero no es una opción ser “un poco de silencio”. Es lo que pasa cuando sales con banda de cornetas pero sigues siendo cofradía de negro y esparto, pides venia por escrito o pones en la calle un cuerpo de nazarenos al mejor estilo silencioso. En su día confundieron la madrugada con silencio y silencio con negritud de paso, repintando uno de los mejores respiraderos de Ceuta (Guzmán Bejarano). ¿Habrá que recordar aquí que las mejores cofradías de silencio tienen pasos dorados? ¿Puede ir a la música el Veracruz? ¡Por qué no! Pero no deberían decir que es una Hermandad que quiere seguir siendo de silencio. Tampoco es de recibo poner la Virgen del Desamparo al lado del Veracruz, cambiando así el sentido de su misterio: “La verdad de la muerte de Cristo en la cruz”. Muerte que los imagineros resaltan con el patetismo clásico de estas imágenes y las hermandades contemplan en la soledad de cruz. Si además se posiciona la Virgen en el paso detrás de aquella es cuando ya no entiendo nada de nada. Ex novo que se diría. Están configurando una nueva estética y decir que la Hermandad está en tránsito a un paso de misterio es anticipar el desaguisado que nos viene. El futuro de esta Hermandad requiere mayor reflexión y criterio, y la falta de costalería no puede justificar el cambio en la idiosincrasia de la Hermandad; antes bien habrá que perseverar en el sentido fundacional de la cofradía sin atender a modas y estilismos pasajeros… Veracruz es mucho Veracruz para reinventarse de nuevo.

Seguramente queda mucho por hacer y los tiempos que vienen no serán fáciles. Hay que ponerse al día”

En cuanto a los pasos del Viernes Santo quedó una noche bastante extraña y no solo por la Hermandad de la Buena Muerte. La Hermandad de la Expiración, que tiene un cortejo muy presentable en todos los sentidos, hermandad discreta y trabajadora, sigue empeñada en un estilo procesional que nada tiene que ver con Ceuta, aunque a ellos les da resultado por lo que veo y los aplausos que cosecha (?). Pero quien rizó el rizo este año fue el Santo Entierro ¿Alguien ha visto en algún lugar de España un paso de Cristo yacente con la virgen de respaldo? ¿Y para más inri cofradiero ataviada con un fajín multicolor? Insisto en lo dicho anteriormente, se cambia el sentido de su Titular y se convierte ahora en otra advocación: “María de la Soledad en la contemplación de su Hijo yacente”. No es seria la solución, por eso decimos “no todo vale…”.

Seguramente queda mucho por hacer y los tiempos que vienen no serán fáciles. Hay que ponerse al día e ir de la mano con lo que pide la iglesia actualmente, sin perder de vista los orígenes de las hermandades y manteniendo lo esencial y fundamental de ellas. Ser más auténticos -no falseando el fin para el que han sido erigidas- es otro de los retos que hay que recordar sin complejos: primordialmente, la difusión de la Fe católica a través de la reconocida religiosidad popular y una presencia activa en la sociedad actual.