El j
juzgado de instrucción número 4 será quien determine las medidas que se van a adoptar sobre los dos detenidos en Ceuta, en el marco de la operación llevada a cabo por la
Guardia Civil enmarcada en la lucha contra el
narcotráfico así como el blanqueo de capitales mediante la compra y venta de licencias de taxi e inmuebles. Los arrestados en nuestra ciudad son un hombre y una mujer, pero en total hay 5 ya que las intervenciones se realizaron al mismo tiempo en otros puntos de la Península. A estos se suman investigados no detenidos cuyo número no se ha concretado.
Tal y como han detallado fuentes conocedoras de la investigación a El Faro de Ceuta, la llamada Operación Artio viene gestándose desde el año 2020, cuando comenzaron las investigaciones en torno a una pareja que llevaba a cabo negocios de compra y venta de casas, inmuebles, vehículos y licencias de taxi. Varias de esas operaciones fueron objeto de investigación por parte de la Benemérita, eligiéndose la jornada de
este miércoles para la práctica de hasta 8 registros efectuados en Ceuta, Benalmádena, Marbella y Algeciras, lo que dio pie a la hilera de arrestos así como al decomiso de documentación que ahora será analizada por los agentes.
Tal y como adelantó ayer este periódico, en el operativo participaron un total de 150 agentes de diferentes unidades como el Órgano de Coordinación contra el Narcotráfico (OCON-Sur), el Grupo de Acción Rápida (GAR), el Centro Regional de Análisis e Inteligencia contra el Narcotráfico (CRAIN) y el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) junto a las comandancias de Algeciras, Málaga y de la ciudad autónoma.
Desde 2020 se estaban investigando operaciones calificadas de sospechosas
En el caso de Ceuta hubo 5 de los 8 registros totales, en concreto en una vivienda de la
barriada de Juan Carlos I de donde los efectivos del Cuerpo sacaron a una mujer; otro en el Príncipe, en donde se llevó a cabo uno de los arrestos; amén de en una obra en construcción ubicada frente al colegio García Lorca, en la avenida Reyes Católicos. Los investigadores seguían la línea del origen de la financiación para la práctica de las distintas operaciones atribuidas a los detenidos e investigados, considerando que existe un origen delictivo relacionado con el tráfico de drogas para obtener un dinero que luego se blanquea de esa forma para introducirlo en el circuito legal.
Los agentes participantes contaron con el apoyo de efectivos de la Comandancia de Ceuta para sus intervenciones. Esta operación se suma a otras efectuadas enmarcadas en el Plan del Estrecho de lucha contra el blanqueo y el narcotráfico que quedó plasmado en otras operaciones ya realizadas con anterioridad.
En todos los registros se contó con presencia de autoridad judicial para supervisar las distintas acciones emprendidas. La finalización de estas intervenciones en los barrios señalados coincidió con la entrada en los centros escolares de estudiantes que se convirtieron en testigos improvisados de lo que sucedía, así como el inicio de la ruta a los trabajos.