Omar El Gouzi, ganador moral del Mundial de Ciclismo

A su paso por la línea de meta, un ciclista levanta los brazos. Sucede casi en cada carrera y, salvo por confusión, suele hacerlo aquel que la cruza primero. Ese ciclista no es Omar El Gouzi, vencedor moral en el Mundial de Ciclismo en Ruta de Glasgow, que decidió pasar por la llegada del circuito en el que se disputaba la carrera, este domingo, con los brazos levantados en señal de victoria, a pesar de ir descolgado, entre los últimos, a más de diez minutos.

La imagen ha captado la atención de numerosos medios de comunicación y tuiteros, especialmente en Italia, donde nació el corredor.

Natural de la localidad de Peschiera del Garda, El Gouzi es un ciclista modesto, de tan solo 23 años, que jamás ha logrado ninguna victoria ni profesional ni en la categoría previa, sub23. De hecho, nunca ha cruzado la línea de llegada en profesionales por delante del séptimo puesto, que obtuvo en el Campeonato Nacional de Marruecos de este año.

El italo-marroquí tomaba la salida por primera vez en un mundial de ciclismo este domingo, en la escocesa villa de Glasgow.

Merced a la protesta de unos activistas climáticos, que optaron por pegarse las manos al suelo de la carretera, parando la competición durante más de media hora, El Gouzi pudo recuperar fuerzas y consiguió mantenerse en el pelotón durante los primeros kilómetros.

Algo que ya fue imposible para el ciclista del Reino Alauita una vez se alcanzó el circuito y comenzaron a desatarse las hostilidades entre los candidatos al triunfo, a más de 180 kilómetros para concluir la prueba.

Ya descolgado, rodando entre los últimos de la competición, como los representantes de otras nacionalidades exóticas, poco habituales en el ciclismo profesional, El Gouzi aprovechó su paso por meta para obtener la foto de su vida. Una con los brazos en alto cruzando el 'traguardo' de todo un Campeonato del Mundo.

El marroquí podrá sin duda contar siempre que fue el primero en celebrar la victoria, aunque no en conseguirla, mérito que recayó en el holandés Van der Poel.

El Gouzi abandonó poco después de hacer la machada.