"Con estas líneas deseo dar las gracias a todos por vuestro apoyo, vuestras oraciones y muestras de cariño en estos días. Me duele y no puedo aceptar que, a veces, esas muestras de cariño vayan unidas al rechazo a la Iglesia o a nuestro Obispo D. Rafael, nuestro pastor". De esta manera iniciaba Juan José Mateos su carta para comunicar que continuará siendo vicario general tras reunirse con el obispo.
"Sabéis que he lamentado y asumido toda la responsabilidad por los hechos acaecidos el pasado domingo 27 de Agosto y he pedido perdón como se dice en el comunicado del Obispado", indica.
"Quiero también manifestar mi cariño y mi cercanía a la comunidad hindú de Ceuta con la que siempre he mantenido una cordial relación y con la que quiero seguir manteniendo lazos de amistad para contribuir a la buena convivencia y armonía en nuestra ciudad. En el comunicado del obispado de ningún modo se reprueban las legítimas tradiciones hinduistas, ni se falta el respeto a sus integrantes o a sus creencias. Hemos de comprender que la buena relación entre las distintas religiones parte del respeto mutuo y la aceptación de que cada uno tiene sus normas y su propia identidad", afirma el vicario.
"Manifiesto mi deseo de seguir sirviendo a Dios y a la Iglesia y renuevo mi promesa sacerdotal de obediencia y respeto a mi obispo, poniéndome a su entera disposición", añade.
"Quiero comunicaros que en cordial conversación con nuestro Obispo y ante la complejidad de las circunstancias que rodean este hecho, D. Rafael benignamente me ha confirmado en la responsabilidad de seguir siendo su Vicario en esta ciudad de Ceuta. Agradezco a D. Rafael sus muestras de cariño y confianza y manifiesto ante todos vosotros mi compromiso de seguir sirviendo al Señor y a la Iglesia con la ayuda de la gracia. Por tanto seguiré aquí entre vosotros al servicio de la Iglesia de Dios que camina en Ceuta", explica Mateos.
"Muchas gracias a todos, que Dios os bendiga y rezad por mi al Señor para que Él me ilumine en el cumplimiento de mi responsabilidad como Vicario y párroco en esta querida ciudad. Rezad también por nuestro Obispo y por la Iglesia, por la comunidad cristiana de Ceuta, para que siga creciendo en la fe, la esperanza y la caridad", concluye.
De acuerdo con el comunicado el cambio de decisión habría nacido de un nuevo encuentro entre obispo y vicario, nada alude a posibles mediaciones de altas instancias. De hecho la comunidad hindú trasladó este asunto al Papa vía carta y se tiene constancia de que ha habido movimientos desde otros ámbitos para dar a conocer lo ocurrido en la ciudad.
Las críticas ante una decisión que no tenía sentido
La noticia corrió como la pólvora. Un comunicado del Obispado sentenciaba la decisión del obispo Zornoza no solo de reprobar al vicario sino de forzar, de manera indirecta, su dimisión. Todo ello después de la celebración del acto principal de la festividad de Ganesh con la entrada de la deidad al templo de África. Aquello fue un acto emotivo apreciado por todos los presentes, también por los propios cristianos y por la comunidad hindú. Nadie vio en esto una agresión hasta que las presiones comenzaron a hacerse visibles a través de opiniones y blogs de peso en el Obispado. Notas radicales en su contenido que veían en este hecho de convivencia algo impropio con la Iglesia, algo atentatorio contra ella.
La población caballa, los partidos políticos, la propia comunidad hindú, cuantiosos escritos publicados... y todos de apoyo a la figura del vicario, criticando al Obispado por aceptar esa dimisión. Ahora todo vuelve a sus orígenes como si solo se hubiera tratado de un culebrón de verano aunque de mal gusto.
Así que del sacfilegio y la profanación solo quedo una " llamadita de atención" del Obispo al Vicario.
Seguirá lo mismo en esa diócesis, veremos la procesión hinduista del año que viene.
Los principios, la fe Católica el dogma " Extra Ecclesiam nulla salus" de eso ni mencionarlo y una incomprensión de la " Unitatis Redintegratio" , " Nostra Aetate" del CV II trae este relativismo.
Hasta cuando vendrás Señor ?
De acuerdo con usted, Manuel, debemos matizar, estemos o no de acuerdo (como afirmaba una comunidad cristiana de base en nuestra ciudad) que el Vicario Mateos Castro , seguro en su postura , empujado y dejándose llevar por la ventisca que sopla desde ROMA, -aunque se ha pasado y metido la pata hasta el corvejón- no se apartó ni tan siquiera un ápice de la línea del "ecumenismo"
que desde el inicio de su pontificado estableció el Papa FRANCISCO I. El obispo de Cádiz obró en consecuencia provocando la dimisión de su representante episcopal en la ciudad caballa y al darle la noticia del circo montado en el Santuario de la Patrona la vuelta al mundo, el prelado Rafael Sornoza Boy se ha visto obligado, desde Instancias Superiores (lo ponemos en mayúsculas), a restituir en su puesto de Vicario, al dimisionario JUAN JOSÉ.
Lo exigible ahora al Obispo de Cádiz es que, si pidió perdón por la actuación del Vicario y lo cesó debido a que dicho proceder no era NI CANONICA NI ECLESIASTICAMENTE admisible, nos aclare al pueblo católico de Ceuta por qué lo ha restituido en el cargo sin explicarnos el motivo de la su restitución?.